Las canas, esas hebras plateadas que inevitablemente hacen su aparición en nuestras cabezas, son una parte natural del proceso de envejecimiento. Mientras que algunas personas las abrazan como una señal de sabiduría ganada con los años, para otros, las canas pueden ser una preocupación estética.
La aparición de canas es, en su mayoría, una consecuencia directa del envejecimiento. Esto se debe a un declive en la producción de melanina, el pigmento responsable de dar color al cabello, la piel, el iris del ojo y el vello corporal. Cuanta menos melanina se produce, más canas comienzan a aparecer, y el cabello se vuelve blanco o gris. Este proceso es parte natural del envejecimiento, pero también puede estar influenciado por factores genéticos y hábitos alimenticios deficientes.
Ya sea que te gusten o no, nadie está completamente libre de ellas, aunque sí es posible retrasar su aparición. ¿Quieres saber cómo? ¡Sigue leyendo!
TIPOS DE CANAS
Es importante destacar que no todas las canas son iguales, y su color puede proporcionar información sobre la cantidad de melanina presente en el organismo. Las canas se pueden clasificar en tres categorías principales.
Por ejemplo, en el caso de la cana blanca, se caracteriza por la ausencia de gránulos de melanina en la hebra capilar. Debido a esta falta de melanina, es la más difícil de teñir, y a menudo requiere técnicas de matización para disimular su apariencia. La cana gris todavía conserva algún gránulo de melanina, por lo que resultan algo más sencillas de teñir en comparación con las blancas. Y en el caso de las amarillas, debido a que son las que más melanina contienen, pueden ser tapadas -en ocasiones- incluso con simples tintes en casa.
La aparición de canas no solo está relacionada con el envejecimiento, sino también con el envejecimiento de los folículos pilosos, las estructuras en forma de saco donde nace el pelo. Además, existen varios tipos de canas, que incluyen las fisiológicas, que suelen aparecer primero en las sienes y luego se extienden al resto de la cabeza, y las prematuras, que pueden surgir antes de los 20 años o incluso durante la infancia.
También están las canas de poliosis, que son localizadas y forman manchas blancas en áreas como la cabeza, las cejas o las pestañas, y las canas anulares, que se presentan de forma dispersa en toda la cabeza o en mechones de pelo blanco.
FACTORES QUE ACELERAN LA APARICIÓN DE LAS CANAS
Aunque mayormente las canas aparecen por vejez, existen múltiples factores que pueden acelerar la aparición de canas prematuras. Entre los que se influyen:
- Factores Genéticos: La predisposición genética puede ser la causa de las canas, especialmente en casos de poliosis.
- Estrés: El estrés crónico puede afectar la producción de melanina, ya que el cuerpo prioriza las funciones vitales en momentos de estrés y reduce la producción de melanina.
- Enfermedades: Algunas condiciones médicas, como el hipotiroidismo o el vitiligo, pueden desencadenar la aparición temprana de canas.
- Consumo de Tabaco y Alcohol: El tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol también pueden influir en la aparición de canas.
- Uso de Productos Químicos: El abuso de productos químicos en el cabello, como el uso frecuente de secadores, planchas, tintes y otros tratamientos, puede dañar los folículos pilosos y acelerar la pérdida de melanina.
- Higiene Inadecuada: Lavarse el cabello con agua muy caliente o una higiene inadecuada pueden contribuir a la aparición de canas.
¿QUÉ COMER PARA DESACELERAR LA APARICIÓN DE CANAS?
La alimentación desempeña un papel crucial en la salud del cabello y en la prevención de la aparición prematura de canas. Los expertos señalan que una dieta deficiente en ciertos nutrientes esenciales y vitaminas puede contribuir a la pérdida de melanina y al envejecimiento prematuro del cabello. Entre los nutrientes y vitaminas que pueden influir en la salud del cabello se encuentran la vitamina B12, la vitamina D3, el ácido fólico, el hierro, el zinc, el selenio y el cobre, así como las proteínas y antioxidantes.
Los antioxidantes son sustancias que combaten el estrés oxidativo y ayudan a proteger las células del daño causado por los radicales libres. Al incorporar alimentos ricos en antioxidantes en la dieta, es posible reducir el estrés oxidativo y preservar la producción de melanina en los folículos pilosos. Uno de los superalimentos destacados por su contenido antioxidante y su capacidad para prevenir la aparición de canas es la schisandra.
En general, los frutos secos, las legumbres, los cereales integrales o los pescados son algunos de los alimentos que más favorecen el cuidado del cabello. Sin embargo, el superalimento que más destaca en este sentido son los frutos rojos. Su contenido vitamínico y su capacidad como antioxidante colabora en la protección del envejecimiento celular. Si quieres ser previsor y cuidar tu cabello, tenlo claro: una taza de frutos rojos al día y disfrutarás de todos sus beneficios.
