Tener un perro es lo mejor del mundo, pero acarrea una serie de gastos bastante considerables: cuidar su alimentación, lavado, peluquería, camitas y las temidas visitas al veterinario pueden disparar la factura. Para evitarte mayores disgustos al bolsillo, y pensando en la protección de tu mascota, a partir de septiembre será obligatorio contratar un seguro que te ofrecerá una cobertura óptima en caso de daños a terceros. Sigue leyendo y conocerás todas las claves de esta nueva norma.
5EXCEPCIONES AL SEGURO
Si tienes perro y contratas un seguro de responsabilidad civil, tendrás la tranquilidad de saber que estás cubierto ante problemas con terceros. Sin embargo debes tener en cuenta que la aseguradora examinará al detalle cualquier incidente, y si los daños son culpa tuya no asumirá los gastos. Llevar al perro sin la correa en zonas obligatorias, o quitarle el bozal si es una raza PPT (perros potencialmente peligrosos), son negligencias del propietario y por tanto el seguro no se hace cargo de nada.
