¿A quién no le gustan las patatas bravas? En el mundo de la gastronomía, hay platillos icónicos que despiertan pasiones y deleitan paladares en todo el mundo. Las patatas bravas, un clásico aperitivo español, no son la excepción. Estas deliciosas y crujientes patatas, bañadas en una salsa picante llena de sabor, son un favorito en bares y restaurantes.
7Salsa Brava
1. Comenzamos preparando la salsa. Picamos finamente la cebolla y la sofreímos en una sartén amplia con 4 cucharadas de aceite de oliva. Cocinamos a fuego lento hasta que la cebolla esté transparente, evitando que tome color.
2. Agregamos el pimentón dulce y el pimentón picante, mezclándolos bien con la cuchara mientras se cocinan.
3. Incorporamos la harina y la cocinamos durante uno o dos minutos hasta que forme un roux al mezclarse con el aceite.
4. Añadimos gradualmente el caldo de pollo, de manera similar a la preparación de una velouté (similar a una bechamel, pero con caldo en lugar de leche). Cocinamos durante diez minutos para eliminar cualquier sabor a crudo del pimentón y la harina.
5. Finalmente, trituramos la salsa con una batidora y la pasamos por un colador fino para obtener una textura perfecta y suave.