Este verano ha sido testigo de intensas rivalidades en el ámbito público. Junto con las agitadas elecciones del 23-J, también se ha desatado una feroz competencia en las salas de cine con los dos estrenos destacados de la temporada.
Por un lado, «Barbie», la película dirigida por Greta Gerwig, y por otro, «Oppenheimer», dirigida por Christopher Nolan. En juego están sumas considerables de dinero y salvajes estrategias de marketing en las que se han invertido cientos de miles de euros.
7UNA PELÍCULA VINCULADA CON QANON
Además de las acusaciones hacia uno de sus patrocinadores, la película ha sido objeto de críticas por supuestamente tergiversar la realidad en torno a la explotación infantil y por tener vínculos con las teorías conspirativas de QAnon. Aunque no representa directamente las creencias conspirativas de este grupo, se ha promovido como tal en foros y plataformas afiliadas a QAnon, tal como informó The Washington Post a finales de julio pasado. Esta percepción se ha visto fortalecida por el hecho de que tanto Tim Ballard como el actor principal, Jim Caviezel, han expresado respaldo a algunas de las afirmaciones más extremas de QAnon.