Visto desde afuera, y en Merca2 se ha subrayado varias veces, Netflix parece la compañía más afectada por la huelga de guionistas y actores que sigue activa en Hollywood. Pero pareciera que están bastante despreocupados por el tiempo que pueda durar la protesta. El gigante del streaming de hecho parece dispuesto a provocar a los sindicalistas, anunciando que está buscando un «manager de inteligencia artificial» que cobrará unos 900.000 dólares (unos 815.000 euros) al año.
Es una de esas decisiones empresariales que parecen complicadas de entender, pero que parecen demostrar que la empresa está dispuesta a apretar las tuercas de rivales en la negociación. Si bien hay pocas dudas de que la inteligencia artificial es parte del futuro del entretenimiento el buscar una persona encargada del área mientras que los guionistas y directores protestas por mejores condiciones, que pasan por un acuerdo sobre el manejo de esta nueva tecnología en el mundo del entretenimiento, parece una provocación.
También es cierto que parece que Netflix, junto a otras empresas calificadas primero dentro del mundo de la tecnología por encima de la producción de cine como Amazon o Apple, parecen los más dispuestos a estirar la negociación. La empresa parece dispuesta a seguir quemando el contenido que ya tienen producido y sus lanzamientos internaciones hechos en países como la propia España, Corea del Sur o Turkia.
Al mismo tiempo, si se lee las declaraciones en el pasado de Ted Sarandos, el CEO de la compañía, es posible que esté viendo una oportunidad. El directivo siempre ha visto con cierto recelo tener que lidiar con las salas de cine, viéndolas como un modelo igual de arcaico que las tiendas de alquiler de películas que ayudaron a extinguir. Visto así estirar el chicle hasta que las salas se queden sin nuevos estrenos puede ser una idea hasta atractiva.
NETFLIX SE SUMA A LAS EMPRESAS QUE QUIEREN USAR LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL
La inteligencia artificial es un tema controvertido, pero su uso en el mundo del entretenimiento parece inevitable. La realidad es que en las condiciones correctas los actores y guionistas puedan aceptar esta nueva tecnología, como ya lo han hecho como herramienta de apoyo en la industria de la animación, pero no quieren ser reemplazados y menos aún recibir menos pagos por trabajo hecho previamente y del que estas nuevas aplicaciones puedan aprovecharse.
Es un punto delicado, pero que tampoco debería ser una sorpresa al pensar que es una nueva tecnología. La realidad es que lo mismo ocurrió con la llegada de la televisión o de la venta de películas y series en formato físico, que obligaban a recalcular las regalías y los porcentajes de pago de cada una de las partes. La preocupación en este caso viene por lo complicado que ha sido cada paso en la negociación previo a la huelga, y la pausa actual en las negociaciones que mantiene la situación en pausa hasta nuevo aviso.
LA HUELGA SIGUE SIN NEGOCIACIONES
Sea Netflix o una combinación de varias empresas, la realidad es que la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP por sus siglas en inglés) no ha querido continuar la negociación con los sindicatos. Esto ha recibido bastantes críticas públicas de figuras como Dwayne Johnson, Ron Perlman o Meryl Streep, tampoco es una estrategia especialmente extraña, alargar las negociaciones con la parte que perciben como la más débil paras poder sacar más concesiones de la otra parte.
El otro punto es revisar el cálculo de las regalías para el streaming. Esto es una petición que se comparte entre los sindicatos de actores y guionistas, y que podría ayudar a volver a mover la rueda. Este punto es tan delicado para la negociación como el uso de la inteligencia artificial, y que muchas veces es ignorado al hablar de la crisis actual en Los Ángeles.
Pero el escenario sigue siendo complicado para las empresas que dependen de la producción de nuevo contenido. Aunque pueden conseguir algo de tiempo trabajando con realities y producciones internacionales las producciones anglosajones siguen siendo las más importantes para atraer espectadores a las salas y mantener suscriptores en los mercados principales como Estados Unidos. Es un reloj de arena, para ambas partes, que se vacía un poco más todos los días.
Por tanto, es de esperarse que las negociaciones se renueven poco después del final del verano. Al mismo tiempo es posible imaginar que las negociaciones se mantengan al menos hasta el final del año. Es un problema que sigue dejando a espectadores, salas de cine y plataformas sin programas o películas como ‘Stranger Things’, la próxima ‘Misión: Imposible’ y la próxima película de Superman. Tampoco debería ser una sorpresa que un cambio de modelo tan radical como el causado por el streaming haya causado una situación tan caótica como la actual.