La presencia de Messi en el Inter de Miami ha sido una absoluta revolución en la ciudad, pareciera que no hay una sola noticia sobre la ciudad de la florida en la que no se nombre al argentino. También lo ha sido para la MLS, que cuenta de un día para otro con un jugador reconocido mundialmente, con 7 balones de oro y que además sigue siendo considerado parte de la elite, después de todo fue campeón del mundo hace menos de un año. Pero el equipo además ha estado reuniendo a su Barcelona, sumando a Busquets, Jordi Alba, y si todos les sale bien esperan agregar a Andrés Iniesta, Luis Suárez y Neymar a esa lista.
Pero los beneficiados no son solo el equipo, sus fanáticos, y sus anunciantes. Casi por casualidad Apple se ha conseguido con una gran oportunidad de atrapar suscriptores, es que el servicio de streaming de la empresa de la manzanita tiene los derechos exclusivos de retransmisión de la ‘Mayor League Soccer’ (MLS) en todo el mundo, a cambio de una cuota premium después de la suscripción. Dado que es el único sitio donde se puede ver este ‘último baile’ de un grupo de jugadores icónico es fácil imaginar algún culé nostálgico o argentino fiel buscando las opciones para contar con el servicio.
Pero es que además es un buen momento para «encontrarse» con un espectáculo como la reunión del Barcelona del segundo triplete. Hollywood sigue en huelga dejando a Apple Tv Plus, y demás plataformas, esperando a que se resuelva la situación para poder volver a producir contenido con guion. La realidad es que al no tener contenido con guion, o actores, la oportunidad de poder ver a Messi, y con la historia del argentino y sus amigos intentando elevar al último equipo de la liga norteamericana a un nivel competitivo, es que incluso la historia parece sacada de una temporada de Ted Lasso.
Pero más allá de Apple Plus es además la primera vez que desde Europa se presta atención seriamente a la liga norteamericana. Pero por supuesto que el objetivo principal de la llegada del astro rosarino es, finalmente, enamorar a los estadounidenses del futbol. Es que solo el 13% de los espectadores de ese país atienden al deporte rey a diario, cuando el dato del Futbol Americano, Béisbol y el Baloncesto es 44%, el 33% y el 32% respectivamente.
MESSI UNA OPORTUNIDAD DE SUMAR SUSCRIPTORES Y ANUNCIOS
La llegada de Messi es además vista como una nueva puerta a los anunciantes. Según comparte un artículo de Bloomberg el equipo del rosarino, que ya cuenta con anunciantes de la talla de Heineken y Adidas está listo para anunciar otros anunciantes se sumarán en los próximos días. Sería interesante saber si esto se repite en otros equipos, pues si bien el número aún no es demasiado alto solo con su llegada el doble de fanáticos deportivos se muestran interesados en la liga.
Ya eso justificaría la presencia del campeón del mundo en el Inter de Miami. Pero además, si se permite especular con resultados deportivos, puede atraer ojos a competiciones como la ‘Copa de campeones de la CONCACAF’, o el mundial de clubes, que además podría incluir un nuevo encuentro entre Messi y Cristiano Ronaldo, una rivalidad que sigue definiendo el amor de muchos fanáticos europeos por el deporte. Pero para eso el jugador, y el equipo, deberán funcionar como lo espera su dueño: David Beckham.
EL EJEMPLO PELÉ
No es la primera vez en la historia que la MLS apuesta por un jugador de éxito para transformar la liga en un fenómeno cultural. El astro brasileño, y quizás el único jugador que puede competir con Messi como el mejor de la historia, Pelé. El brasileño jugó en el Cosmos de Nueva York después de ser campeón del mundo y sirvió para atraer espectadores a la liga, aunque fue una burbuja temporada que se desinfló con la salida del brasileño.
Esto último es quizás la mayor preocupación que puede tener la organización, tanto la liga como el equipo. En teoría el rosarino podría dejar el equipo en tan solo dos años y medio, cuando se acaba este primer contrato. Por tanto, la liga y el club deben hacer la tarea para emocionar a los espectadores para que se queden una vez que deje el equipo, antes o después.
