Las tapas de mejillones son una opción clásica durante el verano. Son ligeras y se pueden disfrutar tanto frías como calientes, ya sea como aperitivo o como primer plato, en cualquier ocasión. Estos moluscos son ricos en vitaminas y minerales beneficiosos para la salud, económicos, fáciles de cocinar y, además, contienen solo 86 kcal por cada 100 g. Una de las formas más simples y populares de prepararlos es al vapor, para que los puedas disfrutar en su estado más natural, sin ningún tipo de aditivo.
7COCINAR LOS MEJILLONES Y SERVIR
Coloca los mejillones en una olla grande con un poco de agua en el fondo y cuécelos al vapor. A medida que los mejillones se vayan abriendo, retíralos de la olla y añádelos a la cazuela donde se encuentra la salsa. Si después de un tiempo algunos mejillones no se han abierto, es mejor desecharlos. No debes consumir los mejillones que no se abren durante la cocción, ya que esto puede indicar que no están frescos. Corta el limón por la mitad y luego cada mitad en rodajas delgadas. Para servir, coloca los mejillones en una fuente y espolvorea por encima el perejil que habías reservado. Acompaña con unas rodajas de limón. Este plato se puede disfrutar tanto caliente como frío.