El pan duro es la demostración de que la necesidad es la madre del ingenio. Hemos conseguido integrarlo en nuestra gastronomía, empezando por las fantásticas torrijas de Semana Santa y también en otras muchas recetas de cocina; pero aun así hay un problema que nos sigue acechando: ¿hay alguna forma de recuperarlo y devolverle su frescura original?
Olvídate de remedios absurdos y soluciones decepcionantes, ya que te vamos a desvelar el mejor truco para hacer que el pan duro parezca recién hecho, incluso si es de hace varios días. Un método sencillo, eficaz y que además te permitirá ahorrar unos euros en la cesta de la compra.
6¿PUEDO GUARDAR EL PAN EN LA NEVERA?
Pues lo cierto es que no, y por varias razones. Primero, el frío deja el pan duro más rápidamente, ya que el almidón presente en el pan experimenta cambios estructurales a bajas temperaturas. Además, la nevera puede absorber la humedad de este alimento, dejándolo seco y desagradable al paladar. Por otro lado, la refrigeración también puede alterar el sabor y la textura del pan, afectando negativamente su calidad, sin olvidar que al guardarlo en el frigorífico se corre el riesgo de absorber olores y sabores de otros alimentos.