Los taxistas de Barcelona rompen con Ada Colau de cara a las elecciones municipales del próximo 28 de mayo. El colectivo, liderado por Élite Taxi, descarta dar su apoyo a la actual alcaldesa de Barcelona debido al incumplimiento de sus promesas hace cuatro años y convertir a Barcelona en una ratonera para quienes utilizan el coche como vehículo de transporte. Las tornas han cambiado para Colau y sus ‘Comuns’. Cabe señalar que tanto el PSC como ERC traicionaron los acuerdos con las plataformas a espaldas del Parlament.
Los taxistas apoyaron a Ada Colau en 2015 y 2019 sin ningún tipo de miramiento, una exposición que les ha encasillado estos años, más por el apoyo explícito de Alberto Álvarez a organizaciones afines a los ‘morados’. El apoyo se debió a las distintas promesas de Ada Colau a los taxistas, reivindicaciones históricas y un mejor trato por parte de la Administración de la Ciudad Condal.
Nos ha eliminado cientos de paradas, numerosas estratégicas; ha quitado carriles y reducido la velocidad en muchas calles, con límites de 30 km/h
Sin embargo y tras cosechar el voto de una parte importante de los 10.500 taxistas, Colau no sólo incumplió la parte del trato, sino que ha convertido y busca transformar a Barcelona en una ciudad prácticamente peatonal, un objetivo que corre en contra de estos autónomos y asalariados. «Nos ha eliminado cientos de paradas, muchas de ellas estratégicas al estar ubicadas frente a hoteles; ha quitado carriles y reducido la velocidad en muchas calles, con límites de 30 km/h», ha señalado Álvarez en declaraciones a MERCA2.
EL TAXI CARGA AHORA CONTRA COLAU
A su juicio, las denominadas superislas, zonas completamente reservadas a vecinos y que tienen prohibido el aparcamiento los vehículos no residentes, han sido una gran lacra en la ciudad. Los planes de Colau, si vuelve a tomar el bastón de mando, es implementar esta movilidad reducida que estrangula a conductores y comercios. «Sólo nos faltan las bicicletas en las rondas -vías rápidas de circunvalación de Barcelona-», ha ironizado Álvarez.
Con esta premisa y fijar su posición de cara a la contienda electoral, el líder de los taxistas de Barcelona ha escogido el día después del mitin central de Colau para dar a conocer su intención de voto. Cabe señalar que los taxistas son libres de votar a quien deseen, pero no es menos cierto que las palabras de Álvarez son tenidas muy en cuenta a la hora de dar el voto a una formación concreta, como han venido haciendo hasta ahora.
Álvarez admite que es una ruptura en cuanto a su posicionamiento de hace cuatro años, pero manteniendo la relación con la formación morada. «Mi deseo es que gobierne el PSC en Barcelona», ha asegurado. Según ha relatado, el motivo se centra en las peticiones aprobadas por los socialistas durante este mandato, especialmente el decreto antiCabify y la exigencia de los 4,9 metros para los vehículos de alquiler con conductor. Asimismo, la luz verde a la aplicación pública y la presión de la Guardia Urbana de Barcelona contra estos vehículos privados operados por las plataformas han sido determinantes a la hora de declinar su voto.
Antes de dar su apoyo explícito a los socialistas, los taxistas han analizado el trabajo de cada uno de los partidos políticos en los últimos años para tomar la decisión. En una carta abierta, Élite Taxi ha asegurado que sólo se limita a hablar de lo estrictamente relacionado con Cataluña y en especial a la Área Metropolitana de Barcelona.
ELOGIOS A DAMIÀ CALVET, EX CONSEJERO DE JXCAT
En este sentido, se han acordado de Damià Calvet, el ex consejero de JxCat que defendió a capa y espada al sector del taxi con el primer decreto restrictivo para las VTCs, especialmente con su promesa para establecer los quince minutos de precontratación, un tiempo que la AMB quiso prolongar hasta los 60 minutos, una decisión tumbada después por los tribunales.
«Esperamos que los candidatos de Junts, en el AMB, sean conscientes de la importancia del taxi como modelo de servicio público, de proximidad, compuesto por autónomos y que paga sus impuestos», han señalado los taxistas en referencia a Xavier Trias, quien ha afirmado que tiene carta libre para poder llevar a cabo los pactos. Según ha señalado, la directora de Transportes, Mercè Rius, fue «clave» en las negociaciones del decreto antiCabify, a pesar de la presión.
Acto seguido, ha aplaudido a ERC. En este caso, por mover su posicionamiento en relación con el taxi y las plataformas como Uber, hasta llegar al punto de ser decisiva en la protección del sector. Los de Pere Aragonés en la Comunidad Autónoma pasaron del silencio a un claro apoyo al taxi. ERC «ha cumplido con su palabra», afirman.
EL TAXI APLAUDE EL CAMBIO EN ERC
En este caso, han mostrado su respaldo al diputado José Rodríguez, que en todo momento fue muy transparente y leal al Govern a pesar de que la Consejería de Territori, la competente en las VTCs, estaba en manos de JxCat. Los taxistas también han defendido la interlocución con la Dirección General de Transports, controlada por Oriol Martori, cuyo trabajo definen como «excelente» y forjar el objetivo de mejorar la regulación del sector.
Para Ada Colau, sin embargo, no hay tanto elogio. De hecho, de todos los directivos y cargos, tan sólo se nombra a la hasta ahora alcaldesa de Barcelona. Los morados han estado siempre con el taxi, disponibles cuando lo hemos necesitado y facilitado la interlocución con las instituciones del Ayuntamiento, de la AMB y el Congreso de los Diputados. «Recordemos que fue Ada Colau quien estableció la precontratación de una hora, que tumbaron los tribunales, y que se llevó una querella de Uber por su defensa del sector sin ambages», señalan.
Por otro lado, se fija en la férrea defensa de la CUP al sector a favor de los trabajadores y autónomos del taxi, «oponiéndose a la economía de plataforma y dando apoyo a todos aquellos desfavorecidos y explotados por este tipo de empresas, cosa que sucede cada vez en más sectores».
Daniel Vosseler, candidato de Barcelona ets Tú y abogado de Élite Taxi en varios procedimientos, también se ha llevado el reconocimiento.
EL PSC SE PLIEGA AL TAXI POR ELECTORALISMO
Sin embargo, es el PSC el que se lleva el premio, con Rosa Alarcón, ex presidenta del Instituto Metropolitano del Taxi (IMET), como máximo exponente. El cargo lo tiene ahora Laia Bonet. Ambas son socialistas y su labor ha sido «determinante» en estos últimos años. Este trabajo se ha materializado en PICMI, la plataforma pública que lleva pidiendo el taxi desde el pasado 2016 y que el equipo de Colau afirmó que «no era posible».
La promesa de los socialistas pasa ahora por evitar que miles de VTCs puedan colarse por la puerta de atrás. Asimismo, los taxistas aseguran que fue el PSC quien «consiguió que las entidades bancarias dieran moratorias a los taxistas y estos no perdieran su licencia» durante la pandemia. Además, permitieron una mayor gama de vehículos para poder utilizarlos en el taxi. Las más de 8.000 denuncias desde 2021 contra las VTCs también han tenido un peso importante a la hora de dar este apoyo explícito.
CRÍTICAS DEL TAXI A PP, CS Y VOX
Como siempre, «no nos escondemos, y ofrecemos nuestro apoyo no a los que prometen cosas sino a los que nos han demostrado más resultados, sin desmerecer a nadie y agradeciendo el trabajo de todos y todas. Este año nuestro apoyo es para los socialistas de Barcelona», reza la misiva.
Por otro lado, han señalado a quienes se han mostrado en contra del sector. PP, Ciudadanos y Vox «han promovido el modelo de VTC de plataforma, soltando el rollo de la modernización y otras milongas, aunque sabemos que es porque sus amigos se están haciendo ricos con la uberización», sentencian.