El crecimiento de Málaga en la última década es incuestionable. Además de los grandes proyectos iTech y multinacionales que han recaído en la capital de la Costa del Sol durante estos últimos años, cada vez son más los proyectos culturales y de ocio que escogen Málaga como base. Una ciudad que ha pasado de ser un destino meramente turístico a convertirse en uno de los enclaves más codiciados como primera residencia y como base para multinacionales de la talla de Google, Vodafone o Santander para instalar sus centros de innovación y ciberseguridad en, lo que ya se considera, el Silicon Valley del sur de Europa.
Una modernización que no podría entenderse sin Francisco de la Torre quien, desde el año 2000, ha sabido reinventar la ciudad convirtiéndola en destino de moda de turista e inversores. A las puertas de su sexta reelección, valoramos las «sombras» presentes en cuestión de vivienda.
Doce años durante los Málaga ha crecido y no solo a nivel económico. La ciudad ha sumado 47.511 habitantes, hasta alcanzar los 579.066 en 2022, según datos del INE. La presión demográfica y el interés despertado por los grandes inversores inmobiliarios, han convertido a la ciudad en la tercera locomotora inmobiliaria a nivel nacional. Una estrategia de ciudad en la que se han implicado todos los sectores gracias a acuerdos de colaboración público-privada.
Sin embargo, este significativo crecimiento ha traído una serie de problemas sobre la vivienda. Tal y como alerta un informe elaborado por el Observatorio de Medio Ambiente Urbano (OMAU), ente dependiente del Ayuntamiento de Málaga, ha dado lugar a «dos mundos paralelos e independientes» en la ciudad. Por un lado, las familias que «tienen limitado su acceso a una parte importante de la oferta» del mercado de la vivienda, y por otra, los inversores que, al comprar, adquieren la vivienda «al contado».
Motivo que, durante esta última legislatura, ha llevado a que el ayuntamiento malagueño pusiera el foco sobre tres pilares fundamentales: vivienda pública, alquiler asequible y ayuda social al alquiler. Movimiento con el que el ejecutivo intentaba evitar la salida de los propios malagueños de la ciudad, quienes cada vez viven con mayor dificultad el acceso a una vivienda.
Tres temas de plena actualidad en la cita electoral malagueña de 2023, y que, según el nuevo Plan Municipal de Vivienda y Suelo 2023-2027, oportunamente aprobado por el consistorio en marzo, el número de hogares malagueños crezca en 5.000 durante este periodo.
Construcción de vivienda pública
Ha sido una de las principales promesas de De la Torre de cara a solventar el problema de acceso a la vivienda en un mercado con una demanda que no deja de crecer. Así, 4.000 viviendas protegidas (VPO) en régimen de alquiler y compra, fue la promesa que el gobierno local hizo para esta legislatura.
Según datos del Ayuntamiento malagueño del pasado mes de marzo, desde 2019 “entre viviendas nuevas y de segunda ocupación, se han entregado 194 viviendas protegidas”. A esta cifra se suman otras 53 protegidas con destino a jóvenes, que se entregarán en el primer semestre de este año (38 en Villazo, siete en San Rafael y ocho en Zurbarán).
A estas se suman 526 viviendas más, en diferentes fases de ejecución, gestionadas por el Instituto Municipal de la Vivienda (IMV) y la Sociedad Municipal de Viviendas de Málaga. De ellas, 476 van destinadas a alquiler en el sector Universidad y 35 a la venta, en avenida José María Garnica, según informa idealista.
El plan estima necesario construir un total de 8.900 viviendas públicas
A esto se suma el acuerdo de financiación a tres bandas con la Junta de Andalucía y el Gobierno de España que firmó el pasado 11 de noviembre, para la construcción de 530 viviendas de “alquiler a precio asequible” a cargo de los fondos Next Generation. El ayuntamiento cede cuatro parcelas en el sector Universidad por un plazo de 75 años para esta operación de colaboración público-privada, con una inversión prevista de 56,9 millones de euros (y una subvención máxima de 26,5 millones), a cargo de Lagoom Living Sánchez Blanca S. L. y Redes 2 Promotora Inversiones 2018 V SLU.
Pese a todos estos proyectos, las viviendas entregadas desde 2019 apenas alcanzan las 247 viviendas, más otras 564 en diferentes fases de construcción. Un total de 811 viviendas que se suman a las 530 viviendas acordadas en la Universidad, lo que hacen un total de 1.341, muy lejos de las 4.000 prometidas.
Sin embargo, en tiempo de descuento, el ayuntamiento ha presentado su medida más ambiciosa el Plan Municipal de Viviendas y Suelos 2023-2027. Un plan que, a través de 13.600 actuaciones, promueve el acceso a la vivienda nueva (tanto libres como protegidas) y a ayudas para el alquiler. El plan estima necesario construir un total de 8.900 viviendas. De ellas, 4.100 viviendas protegidas, 2.700 para alquiler (el 65%) y 1.400 para venta (35%), y 4.800 viviendas libres.
Ayudas al alquiler
Durante esta legislatura, el Ayuntamiento de Málaga ha presentado un plan de ayuda al alquiler valorado en 2,1 millones de euros. Según explican fuentes del consistorio, “subvenciona con hasta 18.000 euros el alquiler a familias vulnerables durante cuatro años”. Además, desde el inicio de la actual legislatura a cierre de marzo de este año, el Comité FRES ha realizado 133 concesiones de alquiler social.
El nuevo Plan Municipal de Viviendas y Suelos 2023-2027 prevé 4.700 ayudas al alquiler
Una tercera medida implementada han sido las tres convocatorias de subvenciones para el mantenimiento de la vivienda del Área de Derechos Sociales y Gestrisam. Ofrece una ayuda de 200 euros/año, que benefició a 4.147 personas en la convocatoria de 2021 y a 4.179 en la de 2022. El mismo área municipal aprobó un Plan de Ayudas al alquiler para familias afectadas por el COVID-19, dotado de 1,2 millones de euros para ayudar al pago durante seis meses las rentas de alquiler.
En este mismo orden, el ejecutivo local ha creado la Oficina del Derecho a la Vivienda, dependiente del IM, órgano encargado en canalizar gestiones de hipotecas, desahucios y ocupaciones irregulares de viviendas.
En resumen, determinadas medidas destinadas a favorecer el acceso al alquiler de determinados sectores de la población disgregadas por diferentes concejalías que dificultan el análisis de su cumplimiento, así como su repercusión. El nuevo Plan Municipal de Viviendas y Suelos 2023-2027 prevé 4.700 ayudas, entre las 200 municipales a través del IMV y las 4.500 promovidas por la Junta de Andalucía, que podría aproximarse al objetivo.
Ayudas para la rehabilitación de vivienda
600 comunidades de propietarios se han beneficiado de los distintos programas anuales de Rehabilitación del Centro Histórico, Rehabilitación en Barriadas y Rehabilitación Especial, según informa idealista. A esto se suman 50 edificios que se habrían beneficiado de las actuaciones de accesibilidad en este periodo.
Para este 2023, el ayuntamiento prevé destinar 3,14 millones de euros a la inversión en rehabilitación tanto de barrios como de edificios. Un total de 650 intervenciones a la espera de la ejecución del plan 2023, un avance en una tarea bastante olvidada por el consistorio.
De hecho, el Plan Municipal de Viviendas y Suelos 2023-2027 estima que de las 253.198 viviendas existentes es necesario rehabilitar 64.295.
En cuanto a accesibilidad, se destinarán 6 millones de euros, lo que supondrá la instalación de ascensores en 90 edificios (1.170 viviendas). En Málaga existen 1.060 edificios de menos de cuatro plantas y 1.294 de más de cuatro plantas que no tienen ascensor.
Reducción del IBI
Una de las principales premisas del actual gobierno, está vigente, con la congelación de los principales tributos municipales este 2023. También se ha mejorado la bonificación a familias numerosas aunque no de forma generalizada “Actualmente se bonifica a todas las familias numerosas el 50% para las familias con inmuebles de valor catastral inferior a 91.625,44 euros, y de 90 y 150 euros si el valor catastral es superior y en función al número de hijos”, explican desde el ayuntamiento.
Málaga como la ciudad española con cuota media por IBI residencial más baja
La política de Francisco de la Torre ha conseguido a ubicar a Málaga como la capital andaluza con el gravamen de IBI urbano más bajo: de 0,451 frente al 0,485 de Almería, el siguiente más reducido, o el del 0,79 y 0,74 de Huelva y Cádiz, las capitales más onerosas con el tributo. Además, la ciudad no cobra tasa doméstica de basuras. Esto coloca a Málaga como la ciudad con cuota media por IBI residencial y tasa de basura doméstica más baja entre las siete grandes españolas.
Cesión de suelo para coliving intergeneracional
Promover la cesión de suelo a promotores que construyan alojamientos protegidos para la convivencia de mayores y estudiantes, era una de las propuestas más innovadoras por parte del consistorio. El caso es que poco o nada se ha avanzado en este proyecto. Se puede apuntar dos proyectos de rehabilitación aún en ciernes, uno en la calle Mendizábal para la construcción de 20 alojamientos para mayores, y otro con 16 en la calle Soliva, ambos citados en el presupuesto de 2023.
