Pasapalabra vivió un momento inolvidable el 16 de marzo, cuando entregó el mayor bote en la historia del programa. Fue para Rafa Castaño, quien puso así fin a su eterna rivalidad con Orestes Barbero, embolsándose más de dos millones de euros en una final que recordaremos para siempre.
Es difícil pensar que volvamos a tener dos concursantes de la talla de Orestes y Rafa, cuyas vidas han cambiado para siempre a raíz de Pasapalabra y, al menos de momento, son famosos por derecho propio. En el caso del sevillano todo parecía indicar que iba a disfrutar del magnífico botín, pero en una entrevista para La Roca ha desvelado una realidad impactante: ha tenido que pedir prestado para salir adelante. ¿Cómo es posible? Sigue leyendo para conocer la verdad.
7HA TENIDO QUE PEDIR PRÉSTAMOS
Durante casi un año Rafa ha vivido entregado en cuerpo y alma a Pasapalabra, sin opción a trabajar para obtener otro tipo de remuneración. “He tenido que pedir prestado”, admitía ante una sorprendida Nuria Roca, antes de explicar cómo funciona el concurso. “Al estar mucho tiempo en Pasapalabra, vas acumulando dinero por ganar o empatar programas, y puedes pedir pequeños adelantos de lo acumulado”.