Urbas impugna la adjudicación de Abengoa. La constructora lo advirtió hace justo un mes y cumple su amenaza de judicializar la adjudicación de Abengoa, tal y como adelantó MERCA2. La batalla legal se centra en si Cox Energy, de Enrique Riquelme, presentó su oferta en plazo o bien lo hizo fuera del mismo. En el auto de adjudicación de Abenewco 1, donde se encuentra todo el tejido productivo de Abengoa, el juez dejó claro que todas las ofertas presentadas se hicieron «en plazo», pero Urbas busca ahora que otra instancia judicial se pronuncie al respecto.
Urbas hizo esta amenaza en un escrito de aclaración de su oferta, un documento al que tuvo acceso MERCA2 en exclusiva y que no fue admitido a trámite. «Sin perjuicio de hacer expresa reserva de los recursos que nos asistan si se admitiera alguna de las mejoras que se presentaron fuera de plazo, (Urbas) ha advertido que se trata del único oferente de la unidad productiva global de Grupo Abenewco -donde se encuentra el 70% de los activos de Abengoa-que ha optado por que los bienes y derechos afectos a créditos con privilegio especial se le transmitan con subsistencia de las garantías», señaló la compañía el pasado 27 de marzo.
Urbas considera que Cox Energy presentó fuera de plazo, pese a que el juez aseguró que todas ellas se habían presentado legalmente en la adjudicación
En el recurso de reposición y con la representación del despacho Cuatrecasas, la compañía presidida por Juan Antonio Acedo considera la adjudicación «nula de pleno derecho» al ser presentada fuera de plazo. Asimismo y tras un revés de la banca a su oferta, la inmobiliaria cotizada considera que la oferta de Cox Energy es contraria a la Ley Concursar y «violar la prohibición de asistencia financiera».
URBAS CONSIDERA CONTRARIA A LA LEY LA ADJUDICACIÓN DE ABENGOA
Numerosas fuentes consultadas por este medio apuntaban que la oferta de Urbas se edificó como un «castillo en el aire» e incluso se la tildó de ser un «rescate» a la propia constructora, con un negocio residual de energía. Para Urbas, la primera compañía en interesarse por Abengoa y que tuvo el rechazo de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales, considera su propuesta como la mejor, más cuando, según asegura, tenía el apoyo del consejo de Abengoa y de los sindicatos. En su defensa, Urbas considera que su proyecto da viabilidad al negocio y podría hacer frente a los acreedores.
Según Urbas, su posicionamiento en infraestructuras de descarbonización, energías renovables, agua y combustibles fósiles le da una mayor solidez que Cox Energy. En este sentido, considera que la compañía constructora sirve de «palanca» para el negocio de Abengoa y que ésta pueda crecer. Al contrario de las opiniones vertidas, Urbas asegura que no se trata de una «compañía oportunista» para colocarse en el panorama empresarial con la adjudicación de Abengoa. Según la constructora, «esta operación sí tiene sentido empresarial».
URBAS COSECHÓ EL APOYO DE MAROTO Y DE SU JEFE DE GABINETE EN ABENGOA
Según Urbas, su oferta tendría una eficacia del 100% sobre el empleo, es decir, sostener los 11.300 puestos de trabajo, frente a los 9.500 de la «oferta ganadora». En este sentido, Urbas aseguró tener una cartera de 20.000 millones de euros y un balance de 1.200 millones de euros en activos, con 500 millones de fondos propios. Sin embargo, en su oferta presentó mandatos, sin cerrar ningún acuerdo en firme con ningún proyecto.
Asimismo, contó con el apoyo de la anterior cúpula del Ministerio de Industria, con Reyes Maroto como ministra y Juan Ignacio Díaz como jefe de Gabinete. Ambos han dejado el Ministerio para emprender el camino electoral a la Alcaldía de Madrid y como nuevo director de la Fundación Escuela de Organización Industrial (EOI), dependiente de su Departamento, respectivamente.
Urbas se presenta como un grupo diversificado, pese al gran peso de la construcción en su facturación. Aún así, considera que su ramificación en los negocios reduce las «desavenencias del mercado», mientras afirma que su caja es más que suficiente para pagar y refinanciar deuda, ante la creciente subida de los tipos de interés.
De esta forma, afirma que su liquidez acumulada alcanzaría los 2.000 millones en los próximos siete años, a una media anual de unos 285 millones de euros, mientras que facturaría en ese periodo más de 5.000 millones, más de 700 millones anuales. El Ebitda alcanzaría los 548 millones de euros.
URBAS DUPLICARÍA SU FACTURACIÓN CON ABENGOA
En 2022, la facturación de Urbas fue de 305 millones de euros y un beneficio de 16,6 millones de euros. Es decir, Urbas duplicaría su facturación con sus proyecciones con Abengoa. En este sentido, ha afirmado que podría hacer frente a los pasivos exigibles de Abengoa, un montante que roza los 570 millones y con capacidad de gestión para liquidar dicha deuda en tres años. Sin embargo, la banca consideró que la oferta no superaba a la de Cox Energy.
Asimismo y tal como aseguró en marzo, es la única propuesta que «se puede firmar de forma inmediata al no requerir del consentimiento de los acreedores con privilegio especial». Hace justo un mes, Urbas asegura que su proyecto es el «único» que ha optado «por que los bienes y derechos afectos a créditos con privilegio especial se le transmitan con subsistencia de las garantías».
Por aquel entonces, la banca acreedora no dio su brazo a torcer al ser los únicos con derecho a veto si Abengoa fuera adjudicada a un ofertante que no asegure el pago de estas deudas. Tanto Cox Energy como Terramar tienen capacidad para negociar, más cuando sus primeras ofertas fueran obviadas en el primer análisis de la banca.