Aunque la DGT (Dirección General de Tráfico) vela por la seguridad vial y se encarga de sensibilizar a los conductores, lo cierto es que casi siempre relacionamos esta entidad con las temidas multas. La imaginación de sus autoridades no parece conocer límites, ya que son capaces de sancionarte si conduces con ciertas enfermedades, también por llevar a tu mascota en el coche y hasta en casos tan absurdos como dejar mal colocado el carrito de la compra.
Ahora la DGT suma una nueva multa a esa creatividad a la hora de sancionar, y guarda relación con un producto de uso cotidiano: el Listerine. Cada vez son más los casos en los que un conductor se ha ganado las ‘atenciones’ de los agentes, y todo por cuidar de su higiene dental a diario. ¿Un enjuague bucal te puede meter en problemas al volante? Pues así es, y te lo vamos a explicar todo con detalle.
2ESTA ES LA FÓRMULA DEL LISTERINE
El Listerine previene problemas bucales como la placa o el mal aliento, ya que elimina el 99,9% de los gérmenes si se usa 30 segundos, dos veces al día. Es gracias a la composición del enjuague, formada por timol, eucaliptol, salicilato de metilo, mentol y ácido benzoico; pero el componente principal es el alcohol, algo que ha supuesto un problema para la DGT.