Si alguna vez has tomado huevos revueltos en el buffet de desayuno de un hotel o en algún restaurante, seguramente te preguntarás por qué cuando los haces en casa no te quedan igual de esponjosos y jugosos. Y es que los huevos revueltos, por muy sencillos que sean de preparar, también tienen su truco. Y es precisamente esos trucos los que marcan la diferencia de ente un plato rico y uno delicioso. Los huevos revueltos son ideales para el desayuno o para una cena ligera y saludable, y se pueden combinar con hierbas aromáticas, o utilizar para preparar tostas y canapés.
3AGREGAR UN LÁCTEO
Añadir un lácteo es otro de los trucos que nunca falla. Puede ser un poco de leche, aunque lo ideal es añadir una pizca de nata para cocinar. A algunas personas no les gusta el revuelto con sabor a lácteo, así que depende de los gustos de cada casa. La cantidad debe ser poca, para que no quede demasiado líquido.