En el mundo existen numerosos territorios, pueblos y ciudades con una actividad de terremotos superior a la media, y en la que España no escapa de ellas. De hecho, son varios los puntos los que viven en riesgo de desaparecer del mapa si tiene lugar un fuerte terremoto. Las costas españolas del levante, por ejemplo, tienen un dibujo geográfico que apunta directamente a ello, pero hay más.
En España se producen «miles de millones terremotos al año» pero son pocos los que se dejan sentir. Se trata de una actividad natural y es bueno que se produzcan pequeños seísmos para evitar que se acumule la «energía y desemboque en un terremoto mayor». De todos modos, esto no exime porque, en algún momento, estas pequeñas actividades sísmicas puedan producir terremotos de mayor nivel en algunas zonas de España. Lo descubrimos desde MERCA2.
9En los municipios gallegos de Sarria y Becerreá también se registran importantes seísmos
En general la sismicidad de los Pirineos se concentra en la zona axial de la cordillera y es más densa en el centro-oeste de la misma, en concreto en las zonas francesas de Altos Pirineos y la parte oriental de los Pirineos Atlánticos, según el Instituto Geográfico Nacional (IGN).
A las zonas mencionadas le siguen las islas occidentales de Canarias, el resto de Andalucía, Galicia, el sur de Extremadura y la sierra Ibérica riojana. En el caso de Galicia, la zona sur es la que más terremotos registra en el Macizo Ibérico, aunque el IGN lo define como una región de sismicidad baja a moderada. Estas son, por ejemplo, los municipios lucenses como Sarria y Becerreá.