China es una, si no la mayor, potencia del mundo. Así es China, mucho dinero, mucha gente, mucha motivación y mucha fe. China ha logrado hacer funcionar su proyecto, pero no se trata de una bola de fuego sino de un reactor nuclear, similar al sol, que genera energía casi ilimitada.
El proyecto, que ya se acerca a los 1.000 millones de dólares de inversión y se basa en un reactor de fusión nuclear.
Aunque más peligrosa que las energías renovables, la fusión nuclear es para muchos la mejora definitiva de la inigualable energía nuclear de las centrales que ya conocemos.