No hay un hogar español donde no estén presentes las galletas María. Desde hace generaciones este dulce es el protagonista de meriendas, picoteos a deshoras y sobre todo desayunos, donde niños y mayores las disfrutan mojándolas en su café, en el cacao soluble o incluso al untarles mermeladas o mantequilla. La facilidad para adquirirlas en tu supermercado habitual también contribuye a su popularidad, pero el consumo diario de galletas María puede ser más perjudicial de lo que imaginas.
Es un dicho muy conocido que el desayuno es la comida más importante del día. Desayunar bien te proporciona la energía necesaria por la mañana, además de saciarte para que no caigas en otras tentaciones antes del almuerzo. Aunque hay alternativas saludables como las tortitas que no engordan o las tostadas Hawái, todavía recurrimos a las consabidas galletas María en el desayuno, una opción que, como todo, deja de ser recomendable si se abusa de ella, y te vamos a explicar todos los motivos.
2LAS GALLETAS MARÍA: MENOS SANAS DE LO QUE PARECE
A primera vista unas galletas María son mucho más saludables que un bollo de crema o una palmera de chocolate, pero es una percepción equivocada. Estas galletas son ricas en azúcares, grasas con carbohidratos y sal, de hecho cuatro galletas María equivalen a unas 100 kilocalorías; de modo que imagina si doblas o triplicas esa cifra en cada desayuno, y a diario.