El cocido o fabada asturiana es un plato tradicional que a todos nos encanta, pero se tarda de dos a tres horas en prepararlo según la receta tradicional, y no todo el mundo tiene tiempo.
8El valor nutricional de las habas de la fabada asturiana
Contienen calcio, el magnesio y el fósforo son beneficiosos para la salud de los huesos, el crecimiento armonioso de los niños o las estructuras fuertes en la vejez. Obtenemos 143 mg de calcio, 408 mg de fósforo y 141 mg de magnesio por cada 100 g. El hierro (8,3 mg por 100 g de legumbres) es ideal para la prevención y tratamiento de la anemia.
Además, tienen selenio (3,3 mg), zinc (2,9 mg) y fitoesteroles, con propiedades antioxidantes y antienvejecimiento y es un buen agente de control del colesterol. Las habas no solo nos aportan fibra, sino que ayudan a prevenir el estreñimiento, reducen el colesterol en sangre y estabilizan el azúcar en sangre.
También nos aportan ácido fólico, por lo que es un alimento interesante para mujeres embarazadas y niños en crecimiento, ya que el ácido fólico tiene un efecto antianémico y también puede prevenir anomalías congénitas, lo que es beneficioso para el crecimiento y desarrollo de los niños. También nos aportan mucho potasio y son bajos en sodio, por lo que ayudan a combatir la hipertensión y la retención de líquidos.
Por lo tanto, las habas se recomiendan para mujeres embarazadas, niños y personas que sufren de estreñimiento, colesterol, diabetes o presión arterial alta. Las habas no aportan proteínas completas, pero complementan el chorizo, la morcilla y el bacon o el pan que acompaña siempre a nuestras comidas.