Amazon, Google, Meta, Microsoft, Twitter, la lista de compañías tecnológicas que han protagonizado miles de despidos en el sector tecnológico parece que no cesa. Amazon fue de las primeras empresas en anunciar la salida de sus trabajadores, afectando 18.000 puestos. Por consiguiente, Spotify anunció la carta de despido al 6% de su plantilla, correspondiente a 600 empleados. En total, los analistas barajan que 200.000 personas se han quedado sin trabajo entre 2022 y principios de este año, traduciéndose en un tsunami devastador afectado por la mala gestión estratégica de contrato de personal.
Las respuestas a estos condicionantes se orientan a la subida de tipos de interés, que damnifican a las empresas más endeudadas, y el aumento descontrolado de las plantillas en el sector digital tras el boom de la pandemia. Pero una de las principales causas de los despidos se halla en el acercamiento a la inteligencia artificial, ya que empresas como Microsoft aseguran que es la tecnología que revolucionará la fuente de negocio de las empresas de cara a un futuro próximo, por encima del metaverso.
Amazon recalcó que siguen enfrascados en «un entorno macroeconómico inusual e incierto»
AMAZON Y COMPAÑÍA: LOS DESPIDOS TRAS LA PANDEMIA
La pandemia ha causado muchos estragos a las empresas tecnológicas. Cuando creían que el periodo Covid-19 les beneficiaría en ingresos, lo cierto es que el fin de la epidemia provocó un contraste totalmente diferente y las grandes corporaciones, como Amazon, Meta o Twitter, tuvieron que recortar de alguna forma su estructura empresarial. A consecuencia de ello, el temor a una posible recesión económica se hizo notar de forma inminente y las compañías no tuvieron más remedio que llevar a cabo decisiones desastrosas que trastocaban uno de los grandes pilares que sustentan la productividad de una empresa: los trabajadores.
En este contexto, Meta justificó los despidos por haber sobrepasado el número de ingresos en la compañía durante el confinamiento, ya que se produjo un notable aumento de la productividad y por cometer el grave error de invertir demasiado dinero en infraestructuras de hardware y software relacionadas con el metaverso. Por ello, su CEO Mark Zuckerberg argumentó que, tras el fin de la pandemia, se equivocó y reconoció la mala gestión que se llevó a cabo, haciéndose responsable de la reducción de empleados en su estructura empresarial al invertir cantidades ingentes de dinero. El directivo argumentando que «desgraciadamente, esto no salió como esperaba».
Por su parte, Amazon recalcó que siguen enfrascados en «un entorno macroeconómico inusual e incierto». Por consiguiente, la firma de ventas online subrayó la priorización de su sistema de negocio afirmando que «después de un conjunto profundo de revisiones, recientemente decidimos consolidar algunos equipos y programas». Finalmente, Amazon hizo mención a los resultados de 2022, apuntando a una incertidumbre económica debido a la inflación y la crisis energética, de ahí que planearan despedir a 18.000 empleados.
AMAZON, META O TWITTER, LAS EMPRESAS QUE MÁS SUFREN
No solo la pandemia ha sido un factor clave por el que han errado en gestión empresarial todas las tecnológicas, sino también se han topado con un gran obstáculo: la subida de tipos de interés. Por excelencia, Amazon, Meta o Twitter son las que más sufren las subidas de tipos de interés porque las empresas tecnológicas son reconocidas como las que más dinero ingresan, por lo tanto, los inversores dejan de invertir y el valor de las acciones caen estrepitosamente.
Los expertos dictaminan que Apple ha sido más prudente contratando y se estima que no realiza ninguna reducción de empleados desde hace 25 años
LA OPINIÓN DE LOS EXPERTOS
Ahora bien, ¿estas empresas están al borde del abismo? Lo cierto es que muchas de ellas han acumulado beneficios netos positivos durante el pasado año. Pero, ¿por qué entonces gigantes tecnológicos de la talla de Amazon, Google o Microsoft han acometido tantos recortes en su plantilla si no lo ven estrictamente necesario? Según algunos analistas, la culpa la tienen los gerentes. Un estudio del medio The Verge, las empresas de tecnología utilizan el ingreso por empleado para medir el valor de inversión y haber contratado un gran número de personal durante la pandemia significa que el ingreso por empleado ha disminuido.
Por lo tanto, los despidos no hacen que se reduzcan los costes, sino que probablemente disminuyan porque lo que perjudican es la rentabilidad. MERCA2 ha contactado con el director de la empresa de ciberseguridad Securízame, Lorenzo Martínez Rodríguez, que, en relación al caso de Twitter, expone que «Elon Musk está restructurando la empresa a su criterio, con decisiones que tienen un rumbo errático», pero el autor incide en que habría que analizar caso por caso el comportamiento de otras compañías.
Respecto a la época pandémica, MERCA2 ha solicitado la respuesta de la responsable del departamento de comunicación de SPC, Verónica Catediano, declarando que «había un crecimiento muy acelerado en la demanda de productos de tecnología y era necesario responder a ello con contrataciones masivas». En cuanto a la etapa que vivimos, en un periodo de elevada inflación y a la incertidumbre post-pandemia, Catediano exclama que «las tecnológicas, simplemente, se están replegando en áreas seguras y están frenando las aventuras, que siempre son más caras por impredecibles».
APPLE, LA ÚNICA SUPERVIVIENTE
A modo recopilatorio, Amazon, Google y Microsoft son las empresas que más despidos han protagonizado. La corporación de Jeff Bezos aglutina 18.000, Google, la firma de Sundar Pichai acumula 12.000 y, finalmente, la multinacional de Satya Nadella ha cometido 10.000 ceses. En contrapartida, la única que se ha salvado hasta el momento es Apple, que queda totalmente invicta a esta ola de desprendimiento de personal. Los expertos anotan que Apple ha sido más prudente contratando y se estima que no realiza ninguna reducción de empleados desde hace 25 años.
Mientras algunas Big Tech como Amazon o Microsoft realizaron contrataciones durante la pandemia incrementando su plantilla más del 50%, y en casos extremos como Meta en más de un 90% Apple hacía lo propio con un aumento del 20%. Además, la fabricante de móviles comandada por Tim Cook ha sido la que menos valor ha perdido en sus acciones, alrededor de un 9%, lo cierto es que en enero de 2023 se prevé que su tendencia sea alcista.