Tener varias cuentas bancarias es un buen recurso para mantener organizados y separados los gastos y los ahorros. Esto facilita llevar el control de nuestras finanzas de forma mucho más cómoda y eficaz, teniendo claro en cada momento cuál es el estado de salud de nuestra economía. Incluso puede ser de gran ayuda para mejorar la capacidad de ahorro de algunas personas. Además, con la digitalización de la banca, hoy día abrirse una cuenta es una tarea sencillísima y la mayoría de las entidades ofrecen opciones y planes diferentes para tener cuentas aisladas para gastos diarios y para ahorros.
5LO ESENCIAL Y EL ESTILO DE VIDA
Lo esencial son los gastos fijos mensuales como el alquiler, la hipoteca, el seguro, los recibos de los suministros, la alimentación y otras cuotas habituales. La primera cuenta estaría destinada estos gastos, asegurándonos siempre de que hay saldo suficiente para cubrirlos y no dejar ninguna factura pendiente. Esta cuenta no debería usarse para nada más. Cualquier otro gasto se tomaría de la cuenta de estilo de vida.
Estilo de vida es la cuenta para cubrir los gastos que no son regulares, que generalmente son de ocio y entretenimiento. Aquí se pueden incluir las clases de yoga o las salidas a restaurantes. Como esta cuenta es para gastos no domiciliados, lo ideal es contar con una tarjeta de débito gratuita y sin comisiones.