La fiesta de la democracia regresará a la capital madrileña el próximo 28 de mayo y, para entonces, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, ha prometido una capital libre de obras.
En los últimos meses, y a consecuencia precisamente de los próximos comicios municipales, Madrid se ha llenado de andamios, barro y cemento. Tres elementos habituales en las principales arterias y plazas de la capital.
La Ley actual impide la inauguración de nuevas infraestructuras con menos de 3 meses de antelación a la celebración de unas elecciones
El tiempo abliga a un afrenética carrera contra reloj a Almeida, al que apenas le valen los próximos 40 días para finalizar y poder inaugurar cada una de las obras que hoy en día todavía están visibles a lo largo y ancho de la ciudad. La Ley Orgánica del Régimen Electoral General impide realizar ninguna inauguración durante los 3 meses anteriores a la celebración de unos comicios, que en este caso están convocados para el próximo 28 de mayo.
Así, Martínez Almeida deberá pisar el acelerador si quiere cumplir con la ley, puesto que esta significa que, desde el 28 de febrero, y hasta después de las elecciones municipales, Madrid no podrá celebrar las inauguraciones de las obras todavía sin acabar.
La Plaza de Sol es uno de los enclaves más problemáticos de las obras en Madrid
Es el caso de la Plaza de Sol, la calle Ponzano, la calle de Doctor Esquerdo en su tramo entre Conde Casal y Ciudad de Barcelona (dentro de las obras de transformación urbanística relacionadas con el derribo del Puente de Pedro Bosh), el tramo del Paseo de la Castellana y Cuzco y de los trabajos en la zona del antiguo Vicente Calderón.
¿CUÁLES SON LAS OBRAS QUE QUEDAN POR FINALIZAR?
Durante los 4 años de legislatura de Martínez Almeida, no se recuerda una problemática tan significativa en relación con las obras y los trabajos de remodelación de las calles y plazas de Madrid.
«Vísteme despacio que tengo prisa», un refrán que bien contextualiza la situación actual de las obras de la capital y que deja en evidencia que las prisas no son buenas para nada, y menos para levantar Madrid a tan solo unos meses de las elecciones.
En dos meses finalizarán las obras de toda la Plaza de Sol tras el derribo de ‘la ballena’
Porque la gran mayoría de las obras que aún no han finalizado, aunque se encuentren dentro del plazo estimado de ejecución, dieron comienzo a principios del pasado 2022. Como es el caso de la Puerta del Sol, iniciada en marzo del año pasado.
Tras la ‘inauguración exprés’ -tildada de «chapuza» por la oposición- de parte de la Plaza con el objetivo de dar cabida al turismo en época Navideña, está previsto que se las obras finalicen del todo en solo 2 meses, después de la demolición de ‘la ballena’, la infraestructura más famosa de Sol.
El derribo del Puente de Pedro Bosh en el barrio de Pacífico ha sido una de las obras más incómodas para los vecinos de Madrid
Otra de las grandes obras pendientes de Martínez Almeida antes de la cita de 28 de mayo, son las correspondientes a la calle Doctor Esquerdo en el barrio de Pacífico. Los trabajos comenzaron hace un año con el inicio del derribo del Puente de Pedro Bosh, aunque las incomodidades para los vecinos han continuado con las obras de remodelación urbanística del tramo entre Ciudad de Barcelona y Conde Casal.
ALMEIDA CUENTA LOS DÍAS PARA LAS ELECCIONES
Los vecinos de la capital llevan meses alertas por las molestias e inconvenientes de algunas de las obras de la capital española. Además de las ya mencionadas, los trabajos de la calle Ponzano llevan semanas como quebradero de cabeza para los miles de residentes de la zona.
Almeida ha prometido un Madrid libre de obras para antes de las elecciones municipales
Quizás la calle Ponzano no llegue a tiempo para la inauguración en la cuarentena que aún le queda disponible a Almeida. Pero sí existe una cuenta atrás mucho más agónica: la de las elecciones. El alcalde del Ayuntamiento cuenta con a penas 4 meses y medio para finalizar todas las obras iniciadas durante su legislatura y arañar así, unos cuantos votos que podrían ser decisivos.
En otros casos, Almeida solo tiene 40 días no solo para finalizar sino también para inaugurar, como correspondería en el caso de la Plaza de Sol. Todo siempre cuestión de elecciones.