Con el frío, la piel tiende a perder hidratación y a sentirse tirante, sensible y molesta. Una de las áreas que más sufre con el clima son los labios, ya que su piel es extremadamente fina y no contiene melanina que es el protector natural de la piel. Así que si no se cuidan de la mejor manera es fácil que se agrieten e incluso se formen heridas y las molestas boqueras. Hay algunos hábitos que pueden empeorar aún más la salud de los labios, como por ejemplo humedecerlos con la lengua de forma constante, arrancar la piel muerta o morderlos.
3MANTECA DE KARITÉ
El karité es uno de esos productos comodín que sirven prácticamente para todo. Se puede comprar manteca pura y usarla como un bálsamo labial de toda la vida. Se puede aplicar tantas veces como se desee y además tiene una textura untuosa muy agradable. Esta manteca es muy sensible a las temperaturas, y a veces en invierno se puede solidificar demasiado, de forma similar a como ocurre con el aceite de coco. Otro truco infalible es elaborar una crema intensiva siguiendo la siguiente receta. Los ingredientes son 1/2 cucharada de karité y 1/2 cucharada de pulpa de aguacate. Ponemos el karité al baño maría para que se vuelva líquido y mezclamos la pulpa del aguacate bien triturada. Dejamos que se enfríe para que solidifique de nuevo y ya tenemos un bálsamo maravilloso, muy nutritivo y totalmente natural.