Grifols ha protagonizado la segunda mayor subida de la Bolsa española en la jornada de este lunes. Sin embargo, el precio de las acciones ha ido de más a menos, de subir más de un 7% a cerrar la jornada con un ascenso del 3,63%, hasta clavar los 11 euros por acción, tras haber alcanzado los 11,47 euros en la jornada.
El valor sigue inmerso dentro de una tendencia bajista pese a los intentos de rebote que hemos visto en las últimas semanas
Los ascensos se deben principalmente a un nuevo análisis de Morgan Stanley, que ha mejorado tanto el consejo de ‘neutral’ a ‘sobreponderar’, hasta un precio objetivo de 14 euros frente a los 13 anteriores. Las subidas no se hicieron esperar desde primera hora de la mañana.
JP MORGAN ENFRÍA LAS EXPECTATIVAS EN GRIFOLS
Sin embargo, un informe de JP Morgan ha atenuado las expectativas, al rebajar el precio desde los 15 a los 12 euros por acción. Así las cosas, ambas firmas arrojan un alto potencial de revalorización, del 32% respecto a los precios de cierre del pasado jueves y del 13%, respectivamente.
Aún con este ascenso, Grifols no ha conseguido romper su tendencia bajista, aunque aminora las pérdidas desde inicio del año al 34%. «Después de una caída tan pronunciada, es posible que el mercado pueda hacer rebotes en el valor, pero con mucha precaución, porque por ahora, considero importante ir consiguiendo afianzarse sobre niveles clave como los 12 euros», ha indicado Diego Morín, analista de IG Markets, a preguntas de MERCA2.
LA BANCA DE INVERSIÓN DA LA ESPALDA A GRIFOLS
A su juicio, Grifols ha registrado ligeras mejoras a nivel fundamental, como la subida de ingresos y plasma, pero «el alto apalancamiento sigue siendo un lastre para el valor, cobrándose la desconfianza de los inversores y también de la banca de inversión». Además, ha perdido atractivo por «culpa» de la pérdida de apoyo de los bancos de inversión.
Pese a reducir la deuda, ésta continúa siendo el principal foco de preocupación de la compañía de hemoderivados. «La reducción de la deuda sigue siendo uno de los principales objetivos que tiene el grupo de cara al año 2024, incluso las estimaciones apuntan a un 3,65 veces, aunque me crea dudas que pueda conseguirlo», ha apostillado el analista. En este sentido, se ve una «situación financiera es compleja, con una deuda elevada y un EBITDA bajo».
Así las cosas, Grifols ha chocado con la resistencia de los 11,5 euros en la jornada de este lunes. La escasa fuerza mostrada ha sido el detonante para volver a las caídas, si bien se ha frenado en la zona de los 11 euros. La siguiente resistencia en Grifols se sitúa en los 13 euros, justo en la mitad entre los ofrecidos por Morgan Stanley y JP Morgan.
GRIFOLS, A UNA CAÍDA DEL 17% HASTA SU PRIMER SOPORTE
Por el lado de las caídas, Grifols tiene como soportes los 9,15 y los 8 euros, con una caída potencial de entre el 17% y el 27%. El valor intrínseco de Grifols se mantiene en los 16,5 euros.
Con todo, la situación técnica en Grifols permanece invariable. «El valor sigue inmerso dentro de una tendencia bajista pese a los intentos de rebote que hemos visto en las últimas semanas, aunque por el momento encontró apoyo alrededor de los 8 euros», ha sostenido Morín.
«Es posible que vemos ciertos rebotes en la acción como el de hoy, en parte, por las noticias, aunque considero que debería de continuar la entrada de una alta demanda para lanzar el valor a los 10,50 y 12 euros, dos niveles de importancia», ha sostenido.
Por la parte baja, «nos dirigimos a los 8 euros y mayor extensión de caídas hasta los 6,56 en el peor escenario posible. El precio objetivo rondaría el tramo comprendido entre los 12 y los 14,80 euros», ha concluido.
GRIFOLS, UNA REVALORIZACIÓN DEL 20%
Este tipo de rebotes en Grifols se han convertido en una pauta estacional desde la presentación de sus resultados correspondientes al tercer trimestre, donde no se apuntó más que la subida de ingresos y la evolución del plasma. Y es que, la farmacéutica se ha negado este año a mostrar los resultados del primer y tercer trimestres.
No es obligatorio hacerlo, pero es un ejercicio de transparencia casi obligado a una compañía que ha llegado a registrar abultadas pérdidas en Bolsa. De hecho, llegó a perder cerca de 12.000 millones de euros y ahora capitaliza cerca de 6.800 millones.
Antes de la publicación de estas cuentas, Grifols se dejaba más de un 46% en Bolsa. A raíz de su rendición, la compañía se ha revalorizado más de un 20% en el último mes, abriendo una puerta a la esperanza, pero no se trata ahora de un rebote sostenido al mantenerse en la senda bajista iniciada desde que saltaron los primeros problemas de su deuda. El valor, sin embargo, se ha alejado de la UCI y trata de saltar resistencias, aunque sin fuerza para poder romperlas.