Ser un personaje popular obliga a no cometer nunca ningún descuido, o de lo contrario las cámaras siempre están ahí para inmortalizar cualquier momento incómodo. Muchísimas han sido las famosas que han mostrado más de lo que les hubiese gustado por culpa de una situación inesperada. Y la reina Letizia, por mucho que controle a la perfección todos los detalles de la mayoría de sus apariciones públicas, tampoco se ha visto libre de este tipo de imprevistos.
El último de ellos ha sucedido en Valencia, cuando el sol y las transparencias de su ropa han formado una combinación que no ha dejado indiferente a nadie, empezando por los presentes en el lugar.
4Un lujo relativo
Es natural que cuando alguien como doña Letizia acude a cualquier parte los expertos no tarden en dar los detalles de su vestuario. Durante su paso por Valencia, los especialistas en moda rápidamente fueron conscientes de que su vestido, que ya había estrenado con anterioridad, pertenecía a la firma Emporio Armani. Solo por ese nombre, está claro que la gente de a pie, por así decirlo, piensa en lujo.
Pero aunque así sea, conviene ser conscientes de que la prenda no es de las más caras de cuantas Armani cuenta en su catálogo. En este caso, hablamos de un artículo que ronda los 400 euros. Está claro que no es precisamente un trapillo, pero sí tiene algunas características peculiares, como lo fino de su tela, capaz de mostrar transparencias como las que Letizia dejó bien claras expuesta al sol del Mediterráneo.
