El adobo es una forma muy eficaz y deliciosa de conservar la carne en buen estado durante más tiempo. Se lleva utilizando desde hace siglos, junto con otros procedimientos como el ahumado o el encurtido. Sin embargo, el adobo es perfecto para darle un sabor único y muy especial a la carne de cerdo, en particular a las costillas, un plato muy consumido en un montón de lugares del mundo y en cualquier época del año.
7PREPARACIÓN DEL ALIÑO
Cuando los ajos estén tostados, los utilizamos para preparar una deliciosa salsa de perejil. Para ello picamos el perejil finamente en un vaso de batidora y lo cubrimos con el aceite de oliva. Añadimos los dientes de ajo pelados, el zumo de limón y el vinagre y trituramos hasta que quede una mezcla homogénea. Después disponemos las costillas en una bandeja y las regamos con este aliño. Ya están listas para servir. Este aliño también es exquisito para aderezar patatas asadas, pastas o verduras a la plancha.