El adobo es una forma muy eficaz y deliciosa de conservar la carne en buen estado durante más tiempo. Se lleva utilizando desde hace siglos, junto con otros procedimientos como el ahumado o el encurtido. Sin embargo, el adobo es perfecto para darle un sabor único y muy especial a la carne de cerdo, en particular a las costillas, un plato muy consumido en un montón de lugares del mundo y en cualquier época del año.
4INGREDIENTES PARA LA SALSA
Aunque las costillas estén adobadas, en el momento de servirlas, Berasategui las presenta con un riquísimo aliño de perejil y limón. Estos son los ingredientes:
- 9 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
- 60 ml de zumo de limón
- 6 g de perejil picado
- 6 dientes de ajo asado
- 3 cucharadas soperas de vinagre de sidra