Si no eres de los que cocina habitualmente, es posible que la repostería te parezca algo complicado. Sin embargo, hay recetas fáciles que cualquiera puede hacer, incluso tartas y otros deliciosos postres.
Para demostrártelo, hoy te traemos una tarta tan sencilla y rápida que vas a buscar cualquier excusa para poder hacerla. Una alternativa perfecta para servir un sábado o un domingo en casa tras una comida familiar.
3Preparación del chocolate para la tarta
Lo primero que hay que hacer es fundir el chocolate. Si quieres hacerlo al estilo tradicional, puedes fundirlo al baño maría. En una cazuela, pon un poco de agua y la calentamos a baja potencia.
Encima de la olla coloca un bol resistente al calor y en él deposita el chocolate. A medida que el agua coja calor, irá derritiendo el chocolate, y tendrás que removerlo para que alcance una buena resistencia. Es importante que el agua nunca entre en contacto con el chocolate.