Quien más y quien menos, todo el mundo conoce las alitas de pollos, las ha comido alguna vez o incluso las ha cocinado. Ya sean al horno o fritas, se trata de un plato bastante económico y que suele gustar a todo el mundo, también a los más pequeños de la casa. Pero, dada su popularidad, también existen recetas que le dan un toque diferente al plato, y con el cual es posible sorprender a la familia y a los amigos. Es el caso de las alitas de pollo al limón.
¿Quieres saber cómo prepararlas para que queden lo más sabrosas y crujientes posible? Pues no pierdas detalle, porque te lo contamos.
5Las alitas, directas al horno
Cuando las alitas ya estén listas en la fuente, solo queda hornearlas. Primero es aconsejable hacerlo a 200 ºC, unos veinte o veinticinco minutos (uno puede ir viendo cuando el pollo tiene buena pinta), y después subir al máximo la temperatura del electrodoméstico para cocinar el pollo unos cinco o diez minutos más.
De esta manera las alas quedarán lo más crujientes y sabrosas posibles.