Todo parece indicar que algunas de las propuestas estrellas de Telecinco para este otoño no terminan de convencer a la audiencia habitual del canal de Mediaset. Un buen ejemplo de ello es Pesadilla en el paraíso, un reality que, desde su comienzo, no ha logrado alcanzar ni de lejos las cifras que este tipo de programas acostumbraban a tener hace unos años. ¿Se debe a que este fenómeno televisivo ya comienza a fatigarse o más bien a que sus protagonistas no han cuajado del todo entre el público? Resulta difícil saberlo, pero da la sensación de que Telecinco piensa que más bien se trata de lo segundo.
Lejos de tirar la toalla con el proyecto, la cadena parece interesada en redoblar sus esfuerzos para volver a recuperar el apoyo de los telespectadores.
2Los cambios de cromos de Pesadilla en el paraíso
Muchas veces poco importa de qué trate un reality, ya sea de cocina, en una playa supuestamente desierta o, como en el caso de Pesadilla en el paraíso, en un ambiente rural. Su mayor atractivo, habiendo pasado ya mucho tiempo desde los tiempos de Gran Hermano, se reduce a ver a famosos del mundo del entretenimiento en situaciones comprometidas, por decirlo de alguna manera.
Lo cual viene a significar que si el reparto de una producción no es atractivo, esta se resiente. O lo que es lo mismo, pierde audiencia. Tal vez este haya sido uno de los problemas de Pesadilla en el paraíso, para lo cual Telecinco parece tener una solución: introducir en su particular granja nuevas celebridades que, suponemos, tengan más gancho para el público.
