Las legumbres son una buena fuente de proteínas y se destacan por su alto contenido en nutrientes y bajo aporte calórico. Son también ingredientes versátiles con los que podemos preparar infinidad de preparaciones, tales como guisos y potajes, al igual que otras recetas más veraniegas, como ensaladas, cremas frías o patés. Pero lo cierto es que su consumo provoca gases y comerlas puede convertirse en una experiencia desagradable. Lo bueno es que existen algunos trucos para evitar este inconveniente y poder digerirlas mejor. Te mostramos cuáles son:
7Usar bicarbonato de sodio
Agregar a la preparación de legumbres una cucharada de bicarbonato de sodio también ayuda a acelerar su preparación y favorece al aparato digestivo. Un estudio publicado en The Pakistan Journal of Nutrition, dice que es la mejor forma de eliminar los oligosacáridos. La forma más efectiva de eliminar estos oligosacáridos o almidones y, por lo tanto, hacer menos flatulentas y digestivas las legumbres es añadir una cucharada de bicarbonato de sodio al agua del remojo de las legumbres, y que el remojo fuera de al menos 12-18 horas.