Las legumbres son una buena fuente de proteínas y se destacan por su alto contenido en nutrientes y bajo aporte calórico. Son también ingredientes versátiles con los que podemos preparar infinidad de preparaciones, tales como guisos y potajes, al igual que otras recetas más veraniegas, como ensaladas, cremas frías o patés. Pero lo cierto es que su consumo provoca gases y comerlas puede convertirse en una experiencia desagradable. Lo bueno es que existen algunos trucos para evitar este inconveniente y poder digerirlas mejor. Te mostramos cuáles son:
5Preparar purés o patés con legumbres
Otra forma es tomarlas en forma de purés para evitar los gases. Cuando cocinamos legumbres a fuego lento y de forma prolongada, los azúcares se descomponen, lo que provoca que sean más fáciles de digerir. Igualmente, puede ser útil comerlas trituradas en forma de patés o de hummus. En este sentido, además, tienes la opción de usarlas ya cocidas en conserva, con lo que te ahorrarás un tiempo considerable en la cocina.