La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, se ha mostrado en contra de las deflactaciones del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IPRF) que han llevado a cabo comunidades gobernadas por el PP como «Madrid o Andalucía», ya que beneficia a las rentas altas y no protege a los más vulnerables, y ha derivado al debate sobre el modelo de financiación autonómica la decisión sobre el Impuesto de Patrimonio.
«En el futuro tendremos que ponernos de acuerdo en el modelo de financiación autonómica a propósito de cómo y de qué manera se tiene que comportar esa figura fiscal«, ha explicado la titular de Hacienda en rueda de prensa para presentar el paquete de medidas fiscales para «la justicia social y la eficiencia económica».
Así, la ministra espera que a lo largo de estos próximos dos años (2023-2024) que estará en vigor el nuevo impuesto temporal a las grandes fortunas –que gravará la riqueza neta superior a los 3 millones de euros y es deducible en el Impuesto de Patrimonio–, «toda la política fiscal que tiene que alumbrar el modelo de financiación autonómica esté resuelta».
Durante la presentación del paquete fiscal del Gobierno de coalición, la titular de Hacienda ha cargado contra el modelo de bajadas de impuestos que benefician a las élites y «que busca la individualidad y el sálvese quien pueda»: «Yo lo llamo vaciamiento fiscal y necesita del populismo para poder alimentarse», ha criticado.
En este marco, la ministra ha hecho un llamiento a las comunidades autónomas para que no entren «en una carrera de quién baja más los impuestos» porque es «perjudicial» para el estado de bienestar y la economía: «Pido un debate fiscal riguroso», ha reiterado.
AHORRO DE 746 EUROS FRENTE A LOS 23 EUROS DE DEFLACTAR EL IRPF
Dentro de las medidas anunciadas por el Gobierno, destacan las relativas al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Se sube a las rentas altas y se contempla elevar hasta 21.000 euros el beneficio fiscal que actualmente se aplica en las rentas de hasta 18.000 euros. Asimismo, las rentas del trabajo a partir de 15.000 euros (1.000 euros más que ahora) estarán exentas del pago del IRPF.
«No vamos a tocar ni los tramos ni los tipos de IRPF sino que vamos a ampliar el beneficio fiscal del que ya gozan determinadas rentas bajas y medianas», ha explicado la ministra.
Como ejemplo, con estas medidas relativas al IRPF un trabajador sin descendientes que gana 18.000 euros anuales se ahorraría 746 euros al año, mientras que para este tipo de perfil el ahorro sería de «apenas 23 euros» con la deflactación del IRPF de algunas comunidades.
Según la responsable de Hacienda, deflactar el IRPF como han hecho algunas comunidades autónomas del PP es una medida fiscal que implica una rebaja para todas las rentas incluidas las rentas altas o las rentas medias-altas y además repercute de una forma «muy pequeña» en los colectivos más vulnerables.
Frente a esto, la titular de Hacienda ha defendido un modelo fiscal «más justo» y que alivie los bolsillos de la familia y de las empresas que más lo necesitan . «Frente a los que defienden o son ‘fans’ de las teorías láser, este Gobierno trabaja con responsabilidad y aplica medidas fiscales selectivas y quirúrgicas que van a mejorar el Estado del bienestar y van a fortalecer el carácter progresivo de nuestro modelo tributario«, ha defendido la ministra.