Las manzanas son de las frutas más consumidas durante todo el año porque son sanas, nutritivas y perfectas para comer entre horas. Sin embargo, tiene un inconveniente y es que se oxida muy rápido. A todos nos ha pasado que, pocos minutos después de pelarla, esta se ha puesto de color marrón oscuro, volviéndose muy poco apetecible. Además, hay algunas variedades que se oxidan más rápidamente (las ‘Red delicious’) que otras (‘Granny Smith’ y ‘Golden’). Este proceso, además de cambiar el color, implica alteraciones en el sabor y en el valor nutricional de la manzana. Para que no te suceda, te contamos cómo lograr conservarlas por más tiempo frescas y llenas de sabor.
6Mantener las manzanas unidas
Si elegimos manzanas para llevar al trabajo ya cortadas, la solución puede estar en una bandita de goma. Sólo debes partirla en casa y unirla con una bandita de goma conservando su forma original. Si la fruta se conserva unida no se oxidará porque no tendrá contacto con el aire. De esta forma, aguantará más tiempo fresca. Aun así, ten en cuenta que la mejor opción, si es posible, es no cortarla hasta que la vayamos a consumir y mantenerla fresca en la nevera; ya que el frío retrasa el proceso de oxidación de la misma.