Las manzanas son de las frutas más consumidas durante todo el año porque son sanas, nutritivas y perfectas para comer entre horas. Sin embargo, tiene un inconveniente y es que se oxida muy rápido. A todos nos ha pasado que, pocos minutos después de pelarla, esta se ha puesto de color marrón oscuro, volviéndose muy poco apetecible. Además, hay algunas variedades que se oxidan más rápidamente (las ‘Red delicious’) que otras (‘Granny Smith’ y ‘Golden’). Este proceso, además de cambiar el color, implica alteraciones en el sabor y en el valor nutricional de la manzana. Para que no te suceda, te contamos cómo lograr conservarlas por más tiempo frescas y llenas de sabor.
3El mejor truco para que no se oxiden las manzanas
La sal es un componente que de por sí siempre ha ayudado en la conservación de los alimentos mucho tiempo antes de la creación de los frigoríficos. Por ello, es una buena opción usar sal para conservar las manzanas peladas y cortadas. Diluye ½ cucharadita de sal en 1 litro de agua fría y sumerge en la mezcla los trozos de manzana por unos 5 minutos. Enseguida retíralas y enjuágalas con agua natural Así, lograrás que nunca pierdan su color natural.