España perdería hasta 11 millones de turistas internacionales en 2030 por el impacto de las medidas fiscales y medioambientales sobre el sector aéreo. Así lo refleja el informe ‘Volando hacia un futuro sostenible. Un análisis del coste socioeconómico para España debido al solapamiento de medidas sobre el sector aéreo’ realizado por la consultora Deloitte.
El estudio cifra el impacto negativo en la reducción del 1,6% del PIB (23.000 millones de euros) y 430.000 empleos menos por las medidas del ‘Fit for 55’, entre las que se encuentran la introducción de un impuesto al billete incluido en el Libro Blanco sobre la Reforma Tributaria. En este sentido, solo las medidas fiscales supondrían una caída del 0,9% del PIB y la pérdida del 236.000 empleos en 2030.
El informe se ha presentado este lunes en Madrid en un acto organizado por Asociación de Líneas Aéreas (ALA) y la CEOE, en el que han intervenido sus respectivos presidentes, Javier Gándara y Antonio Garamendi, así como el socio responsable de Economics de Deloitte Financial Advisory, Jesús Valero, entre otros.
MENOS TURISTAS QUE ANTES DE LA PANDEMIA
Los datos reflejados en el informe de Deloitte analizan el coste socioeconómico para el conjunto de la economía española en 2030 de las tres medidas contenidas en el paquete ‘Fit for 55’ dirigidas a la aviación y de la aplicación de un impuesto al billete en España.
La consultora ha analizado el impacto del uso de una cuota del 5% de combustible sostenible en la aviación (SAF), entre tres y seis veces más caro que el combustible convencional, la restricción de derechos de emisión de dióxido de carbono (CO2) y su consiguiente encarecimiento, la aplicación de un impuesto al queroseno a la aviación de 7,53 euros/gigajulio que propone la reforma de la directiva de Fiscalidad Energética y como la posible aplicación de un impuesto al billete de 7,85 euros, como se propone en el Libro Blanco para la Reforma Tributaria.
El informe concluye que la aplicación simultánea de las cuatro medidas señaladas provocará en 2030 se un mayor coste para viajar al país, desencadenando así una reducción en el número de turistas internacionales con el consiguiente impacto económico.
De esta manera, Deloitte calcula que se perderían más de 11 millones de turistas internacionales, además de más de 12.000 millones de euros de gasto, no solo en el sector aéreo, sino en diferentes segmentos del mercado relacionados con el turismo. Entre ellos se encuentra el sector del alojamiento (-3.600 millones de euros) y el sector alimentación (-3.200 millones de euros).
PÉRDIDA DE EMPLEO Y REDUCCIÓN DEL PIB
Asimismo, la consultora destaca una pérdida de 23.000 millones de euros del PIB, es decir, el 1,6%, y 430.000 empleos respecto del tamaño de la economía en el caso base en 2030. La mayor parte de esta caída se debería a la aplicación del impuesto sobre el combustible y el billete.
Solo las medidas fiscales provocarían una caída del 0,9% del PIB y una pérdida adicional de 236.000 empleos, unos datos similares al número de empleos prepandemia en las actividades inmobiliarias en España. Por su parte, las medidas medioambientales (SAF y ETS) supondrían una rebaja del 0,7% del PIB y una pérdida de 194.000 empleos, cifra equivalente al número de puestos de trabajo prepandemia en el sector de la fabricación de vehículos de motor en España.
«Las aerolíneas estamos comprometidas a alcanzar las emisiones netas cero en 2050 y ya estamos recorriendo el camino de la descarbonización«, señaló el presidente de ALA, Javier Gándara, durante su intervención.
«Desde el sector estamos de acuerdo con las medidas medioambientales que contribuyan a alcanzar este objetivo, como es el caso de la introducción de los combustibles sostenibles SAF y la aplicación de un sistema de derechos de emisión ETS, y estamos dispuestos a asumir un sobrecoste en la medida que contribuyen a la descarbonización del sector. Sin embargo, las medidas fiscales responden a un afán recaudatorio y no descarbonizan, generando un importante impacto en el sector turístico, pilar económico para España», añadió.
LAS MEDIDAS PUEDEN SER UN «IMPORTANTE LASTRE»
El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, también solicitó prudencia en la aplicación de medidas fiscales e impuestos que puedan suponer un «importante lastre para la competitividad del sector aéreo», un sector estratégico para la conectividad en España y pilar fundamental del turismo generador de empleo y riqueza.
«Los empresarios españoles tienen claro que la sostenibilidad es el camino a seguir, pero es un reto ambicioso que debe acometerse con inteligencia, de manera ordenada y equilibrada», aseguró el directivo de la patronal.
Jesús Valero, socio responsable de Economics de Deloitte Financial Advisory, señaló que el estudio «aspira a contribuir al debate sobre los efectos en la economía española que podrían tener algunas de las medidas propuestas para conseguir los objetivos del Fit for 55 y de las sugeridas en el Libro Blanco sobre la reforma tributaria para el sector de la aviación».
«Los resultados ponen de manifiesto la importancia de que las decisiones políticas tengan en cuenta los impactos que estas tienen sobre la economía y el empleo. En especial las que se derivan del solapamiento de medidas sobre el sector aviación en los países de la UE que son receptores y donde el turismo es un motor económico principal, como sucede en España», añadió Valero.
El evento de presentación del informe reunió a los máximos responsables de Iberia, Javier Sánchez Prieto; Air Europa, Jesús Nuño de la Rosa; Air Nostrum, Carlos Bertomeu; Binter, e Iberia Express, Carlos Gómez, junto a otros representantes del sector turístico y del tejido económico y empresarial.
En la mesa de debate posterior a la presentación del informe participaron también Juan Cierco, director Corporativo de Iberia; Guillermo Albizuri, director de Travel, Finance, Education & Digital Natives de Google; José Luis Yzuel Sanz, presidente de Hostelería de España y María Zarraluqui, vicepresidenta de Expansión Global de Meliá Hotels International.