El abastecimiento de carne de pollo y pavo en riesgo por los costes

La situación de las granjas que abastecen de carne cada vez es más precaria en España. En concreto, ahora, el sector avícola es el que se encuentra contra la espada y la pared, ya que lleva un largo tiempo asfixiado por los elevados costes. Además, el gran número de cierres de granjas durante este último año ha empeorado la crisis.

De esta forma, las asociaciones agrarias, como Coag, Asaja y Upa, se han unido para pedir al Gobierno y al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, medida urgentes para lograr unos precios justos de estos productos, tanto por parte de la industria y el sector de la distribución.

El motivo es que los precios en origen no se han incrementado, mientras que los consumidores están pagando cada día un precio más elevado por la carne de pollo, que además es la fuente de proteínas más consumida de España.

Tras los cierres de varias granjas avícolas, las asociaciones agrarias también advierten del «enorme riesgo de desabastecimiento» de carne de pollo y de pavo que puede haber en España, durante los próximos meses.

PRECIOS JUSTOS Y UN CAMBIO DE ACTITUD

Las organizaciones agrarias se han unido con la intención de pedirle al Gobierno que haga todo lo posible para lograr que exista un cambio de actitud por parte del sector de la distribución y de la industria, para que se paguen unos precios justos por los productos del sector avícola.

las organizaciones califican la situación del sector como «dramática»

Asaja, Coag y Upa han exigido a la patronal Avianza, que aglutina a las industrias integradoras, a las asociaciones de la gran distribución, y al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación un «cambio de actitud inmediato» y pagar «precios justos» que asegure la supervivencia de los granjeros de pollo españoles, según han informado en un comunicado conjunto.

En concreto, las organizaciones califican la situación del sector como «dramática», debido al aumento de los costes de producción, tanto en el caso de la energía, los combustibles y todas las materias primas y materiales que son necesarios para continuar con el proceso de producción.

ASFIXIADOS POR LOS COSTES

Los granjeros de pollo atraviesan desde hace varios meses una situación límite, debido a los costes que asumen se han disparado por la «brutal inflación» que afecta a sus diferentes partidas.

«Son las granjas de producción las que están pagando la factura de esta crisis, junto con los consumidores»

Sin embargo, el precio que perciben de las integradoras apenas ha variado, mientras que los consumidores están pagando cada día un precio más alto por la carne de pollo, que además es la fuente de proteínas más consumida de España.

«Sin duda, son las granjas de producción las que están pagando la factura de esta crisis, junto con los consumidores, porque el precio de venta al consumidor se ha visto incrementado sin que se haya producido un reparto de este aumento a lo largo de la cadena de valor», han señalado.

Las organizaciones agrarias afirman que sigue creciendo el número de titulares de granjas de producción de carne de pollo y pavo que anuncia su intención de cerrar las naves, «ya que lo único que están haciendo es acumular pérdidas y contraer deudas con sus proveedores».

«Es por ello que en los próximos meses existe un enorme riesgo de desabastecimiento de carne de pollo y de pavo en España», han advertido sobre la posible falta de estos productos en los lineales.

AUMENTAR LA REMUNERACIÓN

De esta forma, Asaja, Coag y Upa urgen a las empresas integradoras agrupadas en Avianza que realicen una revisión inmediata de sus contratos de integración, y a la vista del enorme aumento de los costes de producción, eleven los precios remunerados por los ganaderos, en cumplimiento de la Ley de Cadena alimentaria.

También reclaman una reunión al más alto nivel, con la participación de representantes de empresas integradoras y de empresas de la distribución y OPAs, donde el Ministerio de Agricultura pueda entender la «delicada situación» en la que se encuentra el sector y actúe en consecuencia.

Las organizaciones han enviado también un mensaje a las comunidades autónomas para que agilicen el pago de las ayudas directas por los efectos de la guerra de Ucrania, con el objetivo de dotar de cierta liquidez a las explotaciones avícolas ante la crisis que atraviesan.

En resumen, los elevados costes y el gran número de instalaciones que se han cerrado han llevado a que las granjas avícolas se encuentren en una situación crítica, lo que ha llevado a que este sector pida al Gobierno y al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, medidas urgentes para lograr unos precios justos de la carne de pollo. En concreto, las asociaciones agrarias también advierten del «enorme riesgo de desabastecimiento» de carne de pollo y de pavo que puede haber en España, durante los próximos meses.