Ya sea por la cercanía a la capital o por las posibilidades que ofrece para disfrutar de un entorno tranquilo y libre de contaminación, lo cierto es que hay un pueblo de Toledo que se ha convertido en un oasis para los madrileños.
Es, con diferencia, el más visitado durante el verano. De hecho, muchos cuentan allí con una segunda residencia o alquilan casas para disfrutar del ambiente rural durante toda la época estival, e incluso durante todo el año.
2¿Por qué gusta tanto?
Este pueblo de Toledo tiene muchas razones para resultar atractivo a los habitantes de la ciudad. La primera de ellas es que tiene un ambiente tranquilo en el que se puede disfrutar de un ritmo de vida pausado.
Es posible mirar al cielo sin toparse con una boina de contaminación, y está rodeado de naturaleza y de campos, perfectos para salir a pasear o a dar una vuelta en bicicleta.