Los fartons son unos dulces típicamente valencianos, concretamente de Alboraya, que tienen una característica forma alargada, con una masa muy esponjosa, tierna y ligera, pensada especialmente para que absorba la horchata cuando se moja en ella. Su origen, de hecho, está ligado a esta bebida. Según cuenta la leyenda que la horchata fue calificada como ‘oro puro’ por Jaime I, por su dulzor y su refrescante sabor. A partir de entonces, los horchateros valencianos comenzaron a buscar el dulce perfecto para acompañar a esta tradicional bebida.