Uno de los clásicos que nunca fallan. El sándwich mixto es nuestro mejor amigo, cantidad de veces nos ha salvado una cena o nos ha quitado el hambre a mitad de tarde, pero al mismo tiempo existe una fina línea entre el amor y el odio, ya que si recurrimos mucho a él podemos casarnos de este manjar. Para no explotar la receta original y podamos seguir disfrutando muchos años más de este plato, te vamos a enseñar una variación de la receta que, no sólo te encantará, sino que no volverás a comer un sándwich mixto solo con jamón y queso.
7Sexto paso: cerrar el sándwich
Tras añadir todos los ingredientes, tanto el jamón, como el queso, como el tomate, vamos a cerrar el sándwich y le daremos un par de vueltas para que se funda el queso. El tostado del pan va en función de tu gusto, pero si que es recomendable que por lo menos esté un poco tostado. Una vez que hemos sacado nuestro sándwich, lo colocamos en un plato y dejamos reposar durante dos o tres minutos, lo cortamos por la mitad y ya estaríamos listos para disfrutar de este manjar.