El 40% de los robos de todo el año se producen durante el verano, por eso muchas personas se marchan de vacaciones, felices, pero con cierta inquietud en el cuerpo. Los ladrones, antes de ponerse manos a la obra, llevan a cabo inspecciones de inmuebles, tanto viviendas unifamiliares como bloques de pisos. Durante días estudian si hay movimiento en la casa revisando las cartas en el buzón o el polvo acumulado en la puerta, entre otros detalles.
3CONFÍA EN ALGÚN VECINO
Si tienes un vecino de confianza o un amigo o familiar que viva en las proximidades, pídele que se pase por casa de vez en cuando para regar las plantas, vaciar el buzón de cartas y cambiar algún detalle que haga ver que la vivienda está habitada, por ejemplo variar la altura de las persianas, ventilar, incluso poner la música o la tele un rato.