En las noches más calurosas de verano, dormir con el ventilador encendido es un de las soluciones más frecuentes. La temperatura ideal para conciliar el sueño y poder descansar bien, debe estar por debajo de los 21 °C algo que es imposible después de toda una jornada con los termómetros rondando los 40 °C. Airear la casa por la mañana temprano y por la noche a última hora puede ayudar a bajar algún grado, pero después de muchos días de ola de calor, los hogares lo han absorbido y es obligatorio recurrir a tecnologías para aclimatar un poco el interior.
9RECOMENDACIONES PARA USAR MEJOR EL VENTILADOR
Para usar correctamente el ventilador y que no nos afecten demasiadas contraindicaciones, podemos seguir algunas recomendaciones:
- Poner el ventilador en modo oscilatorio. Gracias a esto evitamos que el aire esté incidiendo todo el rato en el mismo punto.
- Limpiar con cierta frecuencia las aspas del ventilador, que enseguida acumulan polvo e incrementan el riesgo de alergias.
- Elegir un ventilador silencioso. Merece la pena invertir en electrodomésticos que emitan poco ruido.
- No usarlo a máxima velocidad durante toda la noche, porque resecará mucho más el
- ambiente, y habrá más posibilidades de despertar con dolor de garganta, de cabeza y con la nariz congestionada.
- Programar el ventilador. Generalmente, los ventiladores se pueden programar para que funcionen durante unas horas y después se pausen. Se puede dejar en funcionamiento la mitad de la noche para que se apague en la madrugada, cuando el tiempo empieza a refrescar y hace mucho menos calor.
- No situar el ventilador demasiado cerca. Lo mejor es colocar el ventilador a los pies de la cama o a un costado, no muy cerca de la cara. El aire constante cerca de la cabeza durante toda la noche puede generar toda una serie de síntomas desagradables.