En las noches más calurosas de verano, dormir con el ventilador encendido es un de las soluciones más frecuentes. La temperatura ideal para conciliar el sueño y poder descansar bien, debe estar por debajo de los 21 °C algo que es imposible después de toda una jornada con los termómetros rondando los 40 °C. Airear la casa por la mañana temprano y por la noche a última hora puede ayudar a bajar algún grado, pero después de muchos días de ola de calor, los hogares lo han absorbido y es obligatorio recurrir a tecnologías para aclimatar un poco el interior.
8RUIDO BLANCO PARA DORMIR MEJOR
Otro aspecto interesante entre las ventajas del ventilador, es que este aparato emite ruido blanco. El ruido blanco se define como la combinación de todas las frecuencias de sonido, y ayuda a muchas personas a conciliar el sueño. Tiene la capacidad de amortiguar todos los sonidos del entorno como los coches de la calle, las voces de los vecinos, la tele de otras casas, e incluso puede funcionar en casos de tinnitus. Muchas personas lo utilizan para dormir a los bebés. Eso sí, hay que prestar atención a los decibelios del aparato, ya que si es demasiado ruidoso, no obtendremos ese efecto y empezará a ser molesto. Debería estar por debajo de los 55 dB.