Con la ola de calor terrible que estamos sufriendo dan menos ganas aún que el resto del verano en cocinar o en comer platos calientes. Apetece llevarse a la boca algo fresco, eso sí, siempre rico y mejor si es nutritivo. El tartar de salmón es una opción perfecta que reúne todas las condiciones. Hablamos también de la preparación rápida y sin tener que enredarte apenas en la cocina, y menos aún usar el fuego o el horno.
Vamos a mostrarte cómo realizar un tartar perfecto y digno de los mejores restaurantes, ya que por otra parte es una receta y un plato de lo más solicitado en gastronomía, sobre todo ahora en verano. Está de moda y no nos extraña, así que toma buena nota para deleitar a tu familia, amigos, invitados… Es fácil, rápida, rica, sana y sobre todo fresca.
1EL ORIGEN DEL TARTAR
El tartar originariamente se trataba de una preparación que se hacía con carne cruda macerada, y acompañada de salsa tártara, de ahí su nombre. Pero en la actualidad el concepto ‘tartar’ se ha ampliado para denominar a cualquier plato elaborado con pequeños trozos de carne o pescado, acompañados de otros ingredientes como fruta, verduras, o encurtidos, y todo ello condimentado con un aliño especiado y sabroso. Así pues, existen muchas versiones del tartar, aunque las más populares son las de pescado, ya que el resultado es un plato delicioso, fácil de preparar y muy saludable.