Viva la vida se ha convertido en uno de los programas más populares entre el público al que le encanta el mundo del corazón. Sin embargo, no son pocos los que lo consideran una versión más de Sálvame.
Porque al final tienen más protagonismo los conflictos y enfrentamientos entre los colaboradores o entre estos y la presentadora, que la propia información sobre los famosos. De hecho, sabemos que hay dos colaboradoras que no se pueden ni ver.
7Una conversación con un tono elevado
Como cada una de las periodistas consideraba que tenía la razón, desacreditaba lo dicho por la otra. El problema fue que se les acabó yendo de las manos y se dijeron cosas que podrían considerarse como faltas de respeto.
Al final tanto Emma García como la dirección del Viva la vida tuvieron que intervenir para conseguir que los ánimos se calmaran. Tras un rato, el programa pudo volver a continuar con normalidad.