Es conveniente realizar una limpieza normal cada semana en tu casa y una más profunda cada mes o pocos meses. Sin embargo, aún así, por tiempo o despiste, siempre dejamos sin limpiar bien zonas más ocultas o de difícil acceso. Es el caso de las juntas del suelo. Es una zona muy propensa a que se acumule la suciedad y que lo vayamos dejando u olvidando. Al final, nos damos cuenta de lo desagradable y poco estético.
Pero hay un problema añadido. Precisamente, cuanto más se acumula y pasa el tiempo, esa suciedad costará más quitarla, con lo que al final optamos por buscar agresivos y costosos productos de limpieza. Como pasa para el resto de la casa, no te preocupes porque podrás ahorrar dinero quitándolo con productos caseros y naturales, sin elementos tóxicos. Te mostramos cómo y con qué.
7¿Y PARA LAS JUNTAS MÁS «REBELDES» Y SUCIAS?
Sobre todo en zonas casi inaccesibles, es probable que ya las juntas estén ennegrecidas, lo que significa una suciedad y tiempo máximo. Ahí entra ya un peligro para la higiene, puesto que es la señal de que se hayan acumulado moho, bacterias y gérmenes. En este caso lo mejor es usar pasta de dientes, una vez más disponible en tu casa sin necesidad de gasto extra:
Y es que el dentífrico blanco es ideal para limpiar plata, metales y las juntas rebeldes. Basta con aplicarlo con una espátula o un pincel, dejarlo unas horas (mejor toda la noche) y retirarlo luego usando un cepillo de dientes. Finalmente, lo friegas un par de veces y como nuevo.