Tras unos meses de verano algo intensos por las negociaciones políticas, La Casa Real, con los reyes Felipe y Letizia al frente, se han escapado este verano para disfrutar de sus días de asueto y bajo el más absoluto de los secretos. Y es que aunque llevamos ya más de 100 días desgobierno y en una gran parálisis política después de las elecciones pasadas del 28 de abril, los reyes no han dudado en seguir con sus planes naturales.
Ya comentó la Zarzuela que sus vacaciones iban a estar condicionadas por los acontecimientos políticos y unas circunstancias excepcionales. Sin embargo, este escenario de incertidumbre no ha evitado que los miembros de la Casa Real ni los reyes estén disfrutando de un periodo de vacaciones privadas secretas, unas tradiciones de las que no quieren renunciar. Así, desde Merca2.es te explicaremos algunos de sus lujos estos días.
8La cena de Felipe en el exclusivo restaurante de El Trasgu

Por parte de Felipe, y como explican desde Vanitatis, el monarca decidió irse una a cenar con cuatro amigos al exclusivo restaurante El Trasgu, en Torrelodones, que cuenta con una de las cinco mejores terrazas de Europa según algunos portales gastronómicos.
Marchando sin el resto de la Familia Real, el rey y sus amigos eligieron este restaurante, cuya carta está elaborada por el prestigioso chef Carlos España; el local tiene reservados pero el de la Casa Real quiso hacer una degustación de sobremesa.
Como cuentan desde el mismo medio, la cuenta resultó elevada, ya que don Felipe y sus amigos comieron un rodaballo fresco traído del Cantábrico, especialidad de la casa, y un vino gran reserva, que es solo apto para algunos bolsillos. Para finalizar, también hubo rondas de gin-tónics, las copas preferidas del monarca.