jueves, 12 diciembre 2024

Lavanderías: el frenazo en seco de Putin a un negocio en constante crecimiento

IG Markets

El mundo de la inversión no deja de crecer, pese a las adversidades actuales. Si existe una realidad irrebatible es que el emprendimiento y el espectro de la inversión cada día está más ramificado. Las oportunidades de invertir son amplias, y a medida que avanza el tiempo surgen nuevos negocios en lo que invertir, los cuales pueden esconder rentabilidades enormes. Aún esto, la inversión en negocios clásicos también juega un rol crucial en el engranaje económico de un país, y en este, las lavanderías son uno de los mejor valorados.

Pese a que no es el negocio más lucrativo, muchos expertos consideran que es una oportunidad de inversión en un sector que está en constante crecimiento. Como en todo, y aún más en los comercios tradicionales, ha habido una evolución. Las lavanderías autoservicio se han ido adentrando en las grandes urbes. Lo que puede entenderse como un modelo americano ya es un negocio de gran expansión que ha calado y convence a los clientes. Es por ello por lo que los emprendedores apuestan cada vez más por este tipo de negocios. De hecho, hay compañías como La Wash que cuenta con más de 500 establecimientos en la Península Ibérica. 

LOS ALICIENTES DEL NEGOCIO 

Pese a que es un negocio clásico, la entrada del autoservicio le ha sumado un plus que motiva el acercamiento de los clientes. Y es que las lavanderías cuentan con un gran flujo de clientes, atraídos por el lavado de grandes prendas que, sin este tipo de establecimientos, no podrían lavar. El ahorro es otro de los puntos cardinales que explica el porqué del éxito de las lavanderías. Los clientes prefieren lavar sus prendas en lavadoras de gran envergadura porque son conscientes de que, en menos lavados, pueden tener todas las prendas limpias, lo que se traduce en ahorro económico a largo plazo.

Por supuesto, el aliciente del autoservicio hace que sea un negocio dinámico, rápido, en el que el flujo de clientes es constante y apenas hay grandes esperas. Las lavanderías cuentan con varios factores que explican el éxito que actualmente tienen. Se trata de un negocio en auge, el cual no requiere de intermediarios ni de trabajadores. Todo es telemático, algo que agiliza los pagos. Además, bien pueden ser establecimientos que estén abiertos los 365 días del año. Basta con tener el montante para el alquiler del local y pagar los gastos energéticos. Los expertos estiman que la inversión inicial puede estar entre los 45.000 euros y los 110.000 euros. Teniendo en cuenta 

LOS COSTES ENERGÉTICO, UN LASTRE PARA LAS LAVANDERÍAS

La crisis energética ha ralentizado un sector que está en constante crecimiento. Pese que, de estudiar bien el mercado y la competencia, además de elegir un enclave concurrido, las rentabilidades pueden ser abruptas, el negocio está lastrado por los costes energéticos. Y es que los altos costes de la energía se antojan como el principal impedimento para estos establecimientos. Hace un año, una lavandería que facturase 5.000 euros mensuales tendría un coste energético aproximado de entre 500 euros y 750 euros. Esas cifras se han quedado en agua de borrajas, teniendo en cuenta que los precios de luz han marcado marcas históricas. 

Aunque este año ya se antojaba complejo en lo que a los precios de la energía se refiere, la guerra entre Rusia y Ucrania ha agravado más la situación. De entrada, a comienzos de año existía la problemática de la sobredemanda, algo que infló los precios de la energía de forma abrupta. Para satisfacer la demanda energética, las compañías recurrieron al gas, el cual sigue por las nubes. Para más inri, Putin decidió invadir Ucrania el 24 de febrero, lo que echó más leña a un fuego que ya estaba demasiado avivado. Así, hoy en día seguimos inmersos en una crisis energética que parece haberse convertido en un laberinto sin salida para los gobiernos nacionales. 

Las lavanderías, como muchos otros negocios que necesitan de la energía para hacer que todo fluya, se han visto perjudicados por los altos costes de la energía. Pese a que, por ejemplo, el precio de la luz ha ido decreciendo desde los 283,30 euros por MWh que marcaba en marzo, sigue siendo elevado. El precio medio del pasado mes fue de 187,12 euros/MWh. Pese a la reducción, este precio es un 178,78% superior a mayo de 2021. 

RENTABILIDAD SÍ, PERO TARDÍA 

Pese a que las lavanderías siguen siendo un negocio óptimo, con las circunstancias actuales, la inversión tardará más en amortizarse. Se trata de un comercio que cuenta con flujo de clientes. De hecho, los elevados precios de la energía pueden atraer a más clientes en busca de ahorro. Es decir, hay más gente que se decantará por lavar sus prendas en lavanderías autoservicio debido a que saben que la tarifa es estándar, independientemente del precio de la energía en ese momento. De hacerlo en casa, el cliente haría más lavados, lo cual puede suponer un gasto superior. 

En circunstancias normales, la inversión en una lavandería tardaría entre 5 o 6 años en amortizarse. Los expertos coinciden en que es un negocio rentable, siempre y cuando se estudié bien el mercado, la competencia, y se elija una demarcación propicia para atraer a clientes. 

Los costes de la energía (con la participación de Putin) se postulan como el principal escollo de este negocio. Aún ello, y aunque los márgenes de beneficios sean menores, es un comercio óptimo. Bien es cierto que su proyección puede verse frenada debido a las circunstancias actuales. Pese a esto, en el momento en el que se normalice la situación, las lavanderías continuarán siendo ese negocio que muchas consideran que está en constante crecimiento. 


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