A menudo la preocupación médica se centra más en tratar la hipertensión -tensión alta-, por el hecho de que está relacionada con problemas cardiacos. Pero también existen personas que de forma natural tienden a tener la presión arterial en niveles bajos, algo que se puede incrementar durante el verano a causa de las altas temperaturas. La hipotensión, aunque no se suele asociar con enfermedades graves, puede provocar una fuerte debilidad, sensación de mareo, dolor de cabeza e incluso dar lugar a un desmayo. Por lo tanto, es fundamental tratar de mantenerla controlada, y evitar que el calor llegue a afectar hasta ese punto.
2EL CALOR Y LA DESHIDRATACIÓN BAJAN LA TENSIÓN
En verano es habitual sufrir bajones de tensión puntuales, no solo por culpa del calor, también porque nos deshidratamos con facilidad. Durante esta temporada se hacen más planes al aire libre, en la playa, la piscina, o la calle, y en esos momentos perdemos agua sin darnos cuenta. Es ahí cuando pueden aparecer los primeros síntomas de la tensión baja. Si esto te ocurre a menudo, debes saber que hay algunos alimentos que te pueden ayudar si los consumes en los momentos críticos, e incluso de forma habitual.