A menudo la preocupación médica se centra más en tratar la hipertensión -tensión alta-, por el hecho de que está relacionada con problemas cardiacos. Pero también existen personas que de forma natural tienden a tener la presión arterial en niveles bajos, algo que se puede incrementar durante el verano a causa de las altas temperaturas. La hipotensión, aunque no se suele asociar con enfermedades graves, puede provocar una fuerte debilidad, sensación de mareo, dolor de cabeza e incluso dar lugar a un desmayo. Por lo tanto, es fundamental tratar de mantenerla controlada, y evitar que el calor llegue a afectar hasta ese punto.
1CUÁNDO SE CONSIDERA TENSIÓN BAJA
El calor a veces provoca que nos quedemos sin energía, débiles e incluso con una fuere sensación de sopor, y esto puede ser porque la tensión está bajando. Se considera que la presión arterial está por debajo de lo normal cuando el valor alto es de 90 mm Hg y el bajo está en los 60 mm Hg. ¿Por qué baja la tensión en verano? Esto ocurre porque el calor ambiental eleva la temperatura del cuerpo, y esto provoca una vasodilatación que hace que el corazón bombee más lentamente y el riego sanguíneo no oxigene adecuadamente el cerebro o el resto del organismo.