Si hay un espacio donde más suciedad y gérmenes se pueden acumular, junto con el inodoro, es el fregadero. De hecho, mucho más, ya que según la Fundación de Estudios para la Salud y la Seguridad Social (FESS) y la Universidad de Barcelona, en él se concentran hasta 100.000 veces más microorganismos que en el baño.
Pero además en este caso tenemos el problema del fácil atascamiento, sobre todo si fregamos los platos en él, ya que con frecuencia se cuelan restos de comida y otros desperdicios que, por mucho cuidado que tengamos, se va acumulando. Por eso, por higiene y para que el agua fluya correctamente y no se vaya acumulando en la pila, te vamos a mostrar la manera más fácil de desatascarlo, y en pocos segundos.
8EL SIFÓN, PIEZA CLAVE PARA DESATASCAR FREGADERO

Por último, hay que tener en cuenta que a veces es necesario actuar en el sifón: si te asomas bajo el fregadero verás que en el primer tramo de la tubería hay una curva y una rosca. Es el sifón, el lugar en el que típicamente se forman los tapones. Antes de desenroscar ten en cuenta que puede estar lleno de agua y residuos, así que hazte con un cubo y sitúalo debajo para recoger todo el vertido. Una vez haya caído toda la porquería solo tienes que volver a enroscar.
Una vez desatascado el fregadero te librarás de los malos olores y podrás volver a fregar con total tranquilidad. Recuerda tener cuidado con los residuos y verter agua caliente con sal cada cierto tiempo en el desagüe.